Un grave incidente de privacidad ha salido a la luz: más de 370.000 conversaciones con Grok, el chatbot desarrollado por xAI, han aparecido indexadas en motores de búsqueda como Google, Bing y DuckDuckGo, sin que los usuarios fueran conscientes de ello.
Según revelaron Forbes y la BBC, el problema se originó en una herramienta del propio sistema que permite compartir transcripciones mediante un enlace único para enviarlas por correo electrónico o mensaje.
Esa misma función parece haber facilitado que dichas conversaciones quedaran accesibles públicamente e incluso se posicionaran en buscadores.
Las conversaciones expuestas abarcan una amplia variedad de temas: desde consejos cotidianos, como cómo crear una contraseña segura o recomendaciones para bajar de peso, hasta cuestiones mucho más delicadas, incluyendo instrucciones para fabricar drogas, construir explosivos e incluso planes para asesinar a Elon Musk, fundador de xAI.
Estos últimos contenidos violan de manera directa las políticas de uso de Grok, lo que agrava la situación.
La filtración plantea serias dudas sobre la seguridad y privacidad que ofrece xAI a sus usuarios, quienes confiaban en que sus interacciones con el chatbot permanecerían confidenciales.
El hecho de que estas conversaciones puedan ser rastreadas en buscadores genera preocupación y cuestiona la efectividad de las medidas implementadas por la empresa para proteger la información sensible.
Este episodio resalta la necesidad de reforzar las políticas de privacidad y transparencia en plataformas de inteligencia artificial.
La confianza de los usuarios depende en gran parte de que las compañías garanticen la confidencialidad de sus datos y eviten que situaciones de exposición pública como esta se repitan.