Las tarjetas microSD fueron durante años un recurso esencial para ampliar el almacenamiento de los teléfonos móviles. Sin embargo, su uso ha disminuido notablemente, y hoy en día muchos dispositivos ya no incluyen una ranura para este tipo de memorias. La decisión de los fabricantes responde a una combinación de avances tecnológicos, rediseños estructurales y preocupaciones de seguridad.
El almacenamiento interno ya no es un problema
En el pasado, los celulares ofrecían capacidades muy limitadas —entre 8 y 16 GB—, lo que obligaba a muchos usuarios a recurrir a tarjetas microSD para guardar fotos, videos y aplicaciones. Hoy, los teléfonos modernos pueden tener entre 256 GB y 1 TB de almacenamiento interno, reduciendo casi por completo la necesidad de memorias externas.
Diseño unibody y protección estructural
Uno de los cambios clave fue la adopción del diseño unibody, una carcasa cerrada e integrada que no permite retirar fácilmente la parte trasera del teléfono. Esta tendencia, que se popularizó desde 2012 con modelos como el HTC One o el iPhone 5, favorece una apariencia más estilizada, mayor resistencia al agua y al polvo, y menos componentes móviles. Como consecuencia, se eliminó el acceso tradicional a ranuras para microSD.
MicroSD: lenta, menos segura y propensa a errores
Además de razones de diseño, también existen limitaciones técnicas y de seguridad. Las tarjetas microSD suelen tener velocidades de lectura y escritura inferiores al almacenamiento interno de los teléfonos actuales. Esto puede causar fallos o lentitud, especialmente si se intentan usar para ejecutar aplicaciones o guardar datos del sistema.
En términos de seguridad, su pequeño tamaño facilita que se pierdan o se extraigan sin dificultad, lo que representa un riesgo en caso de contener datos personales. Aunque existen mecanismos de cifrado, muchos usuarios no los aplican, lo que deja la información vulnerable en caso de robo o extravío.
Las alternativas: nube y transferencia sin cables
El crecimiento del almacenamiento interno no es la única razón detrás del abandono de las microSD. Hoy existen plataformas de almacenamiento en la nube como Google Drive, OneDrive o Dropbox, que permiten guardar archivos, fotos y documentos de forma segura y accesible desde cualquier dispositivo.
Además, aplicaciones como LocalSend facilitan el intercambio de archivos entre equipos sin necesidad de memorias físicas, con conexiones rápidas y seguras.
Una transición hacia lo digital y más seguro
La eliminación de las ranuras para tarjetas microSD es parte de una tendencia más amplia hacia dispositivos más seguros, eficientes y simplificados. Aunque para algunos usuarios sigue siendo una característica útil, la evolución de la tecnología ha desplazado su uso a favor de soluciones más rápidas, estables y fáciles de integrar en los ecosistemas digitales actuales.