Disney y el director James Cameron fueron demandados en un tribunal federal de California por un animador 3D que los acusa de haber copiado elementos de su obra para la película Avatar: The Way of Water (2022).
La demanda fue presentada por Eric Ryder, quien asegura que partes clave de su historia de ciencia ficción titulada KRZ fueron utilizadas sin autorización en la exitosa franquicia.
De acuerdo con el documento legal, Ryder afirma que a finales de la década de 1990 colaboró con Lightstorm Entertainment, la productora propiedad de Cameron, en el desarrollo de un proyecto cinematográfico basado en KRZ.
Según su versión, ideas y conceptos de ese trabajo terminaron reflejados en el universo de Avatar, particularmente en la segunda entrega.
La demanda cobra relevancia en un momento clave para la franquicia, ya que la tercera película, Avatar: Fire and Ash, ya se encuentra en cartelera en México y se estrena este viernes en Estados Unidos.
Ryder solicita al menos 500 millones de dólares en daños y perjuicios, además de una orden judicial que podría frenar el estreno de la nueva cinta.
No es la primera vez que el animador recurre a los tribunales. En 2011 presentó una demanda similar relacionada con la primera película de Avatar, la cual fue desestimada después de que un tribunal concluyera que Cameron había desarrollado la historia antes de que Ryder enviara su material a Lightstorm. No obstante, en esta nueva acción legal, el demandante aclara que no busca reabrir ese caso, sino señalar supuestos actos de copia que, asegura, ocurrieron por primera vez en Avatar 2.
Entre las similitudes señaladas en la demanda se mencionan la presencia de seres antropomórficos, un entorno oceánico de gran escala y una corporación terrestre que realiza actividades mineras dañinas para el medio ambiente en una luna de un planeta gigante. Ryder también destaca que The Way of Water introduce como eje narrativo la extracción de una sustancia de origen animal capaz de prolongar la vida humana, un elemento que, según él, ya formaba parte central de KRZ y que no apareció en la primera película de Avatar.
El abogado de Ryder, Daniel Saunders, calificó la supuesta apropiación del material creativo como “flagrante”, al considerar que fue utilizada para construir una de las películas más taquilleras de la historia. Hasta el momento, Disney y Lightstorm Entertainment no han emitido comentarios oficiales sobre la demanda.
El caso abre nuevamente el debate sobre los límites de la inspiración y el plagio en grandes producciones de Hollywood, en especial dentro de franquicias multimillonarias como Avatar.
