El nuevo presidente de la Mesa Directiva del Congreso de Morelos tiene diversos retos que habrán de marcar su ejercicio al frente del Poder Legislativo, pues deberá resolver desde temas relacionados con reformas pendientes de dictaminar, hasta asuntos políticos que comenzarán a configurarse de cara a la elección de 2027.
Si bien hasta ahora el Congreso ha dado muestras de consensos en la aprobación de las diversas reformas que ha desahogado, el segundo año legislativo podría ser más complicado, sobre todo en la recta final, cuando empiecen a surgir esos intereses políticos que aparecen rumbo a una elección intermedia.
De ahí la importancia de privilegiar el trabajo a favor de la población y dejar de lado anhelos personales.
Para este periodo, que habrá de comenzar el primero de septiembre, la habilidad de negociación será vital para desahogar la cargada agenda legislativa y no sean presa de aspiraciones que, por legítimas que sean, sería condenable que se antepongan al bien común.