Lo anterior, debido al conflicto que se mantiene en la comunidad indígena desde hace ya más de 10 meses, por el rechazó de las ocho agrupaciones de mototaxis para permitir circular a la agrupación denominada Sangre Nueva, conocida también como “moto taxis negros”, ya que ha sido considerada por líderes de las agrupaciones como “pirata”.

De esta manera, grupos representativos de las ocho agrupaciones San Juanes (verde limón), Citli (rojos), Shalmila (blancos), Caudillo del Sur (azules), Citlalme (morados), Xogotl (amarillos), Verdes de Xoxo y (grises) que suman 455 unidades, se instalan desde las siete de la mañana en diferentes puntos de la carretera local Alpuyeca–Jojutla (en el puente peatonal, el crucero a San José Vista Hermosa) y en calles en el interior de la comunidad con la finalidad de detectar a cualquier mototaxi negro que pretenda circular para detenerlo, como lo han realizado en otras ocasiones.

Por su parte el representante de los mototaxis negros, Epifanio Bastidas Catalán, denunció que tanto él como su familia y sus compañeros siguen siendo intimidados por los líderes de las demás agrupaciones para impedirles que trabajen en la localidad.

Acusó nuevamente al titular de la Secretaría de Movilidad y Transporte, Jorge Messeguer Guillén, y el subsecretario David Martínez Martínez de no resolver el conflicto.

Insistió que únicamente piden que se les deje trabajar, ya que tienen necesidad. “Siguen las amenazas, los acosos. No somos delincuentes, nosotros sólo queremos autoemplearnos; pedimos respeto hacia las motos negras (…) La gente nos acepta, se sube a nuestras unidades (…) Tenemos necesidad y sólo queremos trabajar”, apuntó.

Agregó que son aceptados por la ciudadanía y existen muchas quejas en contra del resto de los mototaxis ya que se niegan a subir a gente de la tercera edad, manejan a exceso de velocidad y constantemente se registran accidentes por la imprudencia en que manejan, además de que hay menores de edad manejando mototaxis.

Finalmente el grupo de mototaxis negros aseguró que continuarán buscando que se les permita trabajar, ya que tienen necesidad. Mientras que el resto de las agrupaciones mantienen la consigna de detener a cualquier unidad que pretenda salir a trabajar.