Guillermo Montiel Ávila, integrante entonces de dicha comisión, reconoció que el organismo ciudadano de alguna manera “entró en letargo” el año pasado, cuando se anunció que el ingenio, que estaba en manos del gobierno federal, iba a ser vendido a particulares.
“El mismo fideicomiso –que administraba al ingenio- ya no quería invertirle (en equipo para reducir la contaminación) porque estaban en ese proceso de licitación. Entonces, no sabíamos, de alguna manera, a quién recurrir para que corrigiera las emisiones de las calderas hacia el ambiente, como era nuestro objetivo principal”.
Reconoció que desde entonces, la comisión no se ha reagrupado, ni tampoco han buscado a los nuevos propietarios. “Estamos esperando la coyuntura (con el nuevo dueño, el grupo Beta San Miguel) para retomar las mesas de trabajo”.
“Estamos creídos, que habrá nuevamente aceptación a la comisión pro ambiente, porque todavía falta definir la ruta de acceso de los camiones cañeros porque se está pavimentando la calle Sanalona y ahora se debe buscar una nueva ruta para que no pasen por ahí y la destruyan”, prosiguió.
“En su momento, también tendremos que platicar con el presidente municipal para ver qué acciones va a realizar para que los camiones transiten por el interior del propio ingenio”.
Añadió que no sólo el comité pro ambiente, sino también los vecinos de la calle Sanalona han solicitado al alcalde que intervenga, para que no pasen más por ahí los camiones cañeros, además de que el mismo ingenio aprobó una nueva ruta.
Con respecto a los pendientes que se quedaron en la última reunión entre el comité pro ambiente, la gerencia del ingenio y otras autoridades estatales, refirió que prácticamente fue lo mismo. “Lo que quedó pendiente fue en realidad precisamente la ruta interna y de alguna manera, ver el comportamiento de las calderas para que verdaderamente se obtenga el 95% (de abatimiento de la contaminación) prometido por parte de la empresa que puso las calderas, y refrendado entonces por el gerente de la fábrica Federico Zalapa”.
Consideró que es importante mantener vigilancia sobre la contaminación del ingenio. “La emisión de partículas definitivamente continúa y es ahí donde entraríamos con las mesas de diálogo, para pedir que eficienten el funcionamiento de las calderas para que verdaderamente atrapen el hollín o el tizne, como lo prometió”.
Vale referir que el comité pro ambiente se creó, luego de que la contaminación se intensificó en la periferia del ingenio hace algunos años. Hizo presión para que se adquiriera equipo anticontaminante y dieron seguimiento a su instalación.