En conferencia de prensa, Fernando Aguirre Acevedo, gerente del Sistema Producto Porcino y de la Asociación Ganadera de Porcicultores del estado de Morelos, criticó que la DEP se presentó desde el año pasado e incluso ya pasó, y apenas en mayo la Senasica advirtió de su presencia e incluyó a Morelos en la lista de estados con presencia de la enfermedad, sin que haya casos en la entidad.

“Esta enfermedad es un virus que afecta única y exclusivamente a los cerdos jóvenes de diez hasta 45 días de nacidos; de ninguna manera afecta a los puercos grandes que son los que se consumen. El humano no tiene ningún riesgo de enfermarse, porque es un virus exclusivo del cerdo; además, es una alerta totalmente fuera de lugar, pues la enfermedad se presentó primero en Estados Unidos en 2012, de ahí se traslada a México y entra al país en agosto del 2013”.

Reconoció que fue el año pasado cuando afectó la planta productiva nacional, pero en los estados de Jalisco, Guanajuato, Michoacán, Veracruz y Sonora, entre otros, pero no Morelos.

“En nuestra entidad no tenemos un sólo caso registrado, esa alerta debió haber salido en octubre (del año pasado) que es cuando el virus se identificó y la alerta más bien era para detener las movilizaciones del cerdo, parar las importaciones y controlar el brote, pero ahorita el virus ya ni siquiera está afectando en nada; hay una que otra granja con el virus, pero es un virus totalmente diferente, ya no afecta como afectó porque ya encuentra poblaciones (de cerdos) protegidas”.

Emplazó a la Senasica a decir en qué lugares de la entidad se presentó la enfermedad, como lo difundió en su alerta. “Que nos digan nada más en qué granja fue, a qué cerdo muestrearon, quién lo muestreó y dónde está la coordinación con el sector productivo, porque el sector productivo no tiene ninguna comunicación al respecto; no hay nada que diga que el virus está presente. Fue una advertencia inútil, irresponsable y fuera de tiempo”.

Afirmó que en Morelos no se presentó ningún caso de la enfermedad y explicó que este padecimiento se caracteriza por ser propia del hacinamiento, es decir, de grandes poblaciones de cerdos que en la entidad no existen.

“Nuestra granja más grande está en el municipio de Tlaquiltenango y está totalmente sana, no hay un sólo indicio de enfermedad. Estamos indignados porque no tenemos que ver en el asunto”, resaltó y sostuvo que esta alerta retrasó las ventas de las granjas.

“Atrasó las ventas del 10 al 15 por ciento de lo que normalmente se vende, si bien se vende dos, tres semanas después, pero finalmente afecta porque además los cerdos se quedan, consumen más alimento, el costo de producción se incrementa por un irresponsable aviso de Senasica”.