Los quejosos refirieron que diariamente esta calle principal es invadida por decenas de comerciantes que se instalan de manera irregular, bajo el cobijo de autoridades municipales, pues, considerándose propietarios de la vía pública, bloquean incluso el acceso vehicular y ponen en riesgo la integridad física de peatones.

Comentaron que durante los días martes y domingos se instala la plaza tradicional, donde incluso se cierra el acceso de las calles, conocido ya por la población; sin embargo, actualmente son los siete días de la semana cuando se obstruye la circulación de parte de los comerciantes ambulantes.

Los afectados señalaron que recientemente se suscitó un altercado entre un ciudadano y los vendedores, cuando el peatón pasó a traer la mercancía. “El comerciante se enoja y se indigna y se molesta. Incluso me quiso cobrar, cuando ellos son los que invaden el espacio público por donde tenemos que caminar”, refirió el afectado.

Por ello, los afectados, de manera anónima, hicieron un llamado a las autoridades municipales para erradicar el ambulantaje, ya que incluso el mercado que se ubica sobre la misma calle permanece desierto, ya que en su mayoría los comerciantes, en lugar de abrir los locales, los utilizan únicamente como bodegas, saliendo a las calles y a la explanada del mercado a ofertar sus productos, lo que propicia que el resto de vendedores busquen instalarse en la vía pública.