Manuel Aranda Vidal, titular del organismo, declaró ayer en conferencia de prensa en este lugar, que quienes venden tortillas de manera ambulante, violan la ley, por eso pedirán que intervengan las autoridades.

“Estamos pidiendo que se aplique la normatividad ya existente, tanto de la Secretaría de Economía como la que le corresponde a la Secretaría de Salud; no estamos diciendo que no hagan el ambulantaje, simple y sencillamente que lo hagan acorde a esa normatividad, de otra manera, que sean sancionados”.

Aseguró que todos los que venden tortillas de manera ambulante, están “fuera de la ley”, porque no cuentan con registro federal de causantes por lo que los tortilleros establecidos quieren trabajar en igualdad de circunstancias.

“Van a venir las denuncias ante la Profeco y tendrán que actuar; porque de otra manera, serán sancionados”.

Reconoció que aún no hay un plazo para hacer cumplir la normatividad, pero primero se les hará la invitación a quienes hacen este tipo de actividades, a que cumplan con ella.

“Muchas veces la gente dice que quien vende la tortilla a domicilio la vende hasta más barato, pero lo que no dicen es que le están quitando gramaje, y que en realidad, sale más caro, porque ellos tienen un costo extra, que es el repartidor, la moto, etc.; lo que queremos es que el consumidor sepa cómo estar protegido. Quien cumpla con la normatividad podrá distribuir en cualquier parte.

“Es muy fácil, sencillamente, en el caso de la Secretaría de Salud, tiene que verificar que el papel envoltura sea grado alimenticio y que esté bajo la norma que pide y da las características adecuadas, y que Profeco, aparte del papel envoltura, la norma dice que tienen que ponerle el gramaje, nombre, razón social, registro federal de causantes, el cuadro nutrimental y de esa manera, podrán vender a quien quieran por todos lados, sin problema. En este momento, se puede hacer el ambulantaje, pero bajo ese tipo de recomendaciones”, expresó Aranda Vidal.

Finalmente, refirió que en los últimos dos años, la venta ambulante de tortillas ha crecido hasta en un 30 por ciento, lo que está afectando a los industriales establecidos.