Rafael Gómez, Trujillo, integrante del comité, informó que el viernes pasado, en lo que fue la 28ª reunión entre los ciudadanos, la empresa y la Comisión Estatal de Agua y Medio Ambiente (CEAMA) –que ahora también fue a puerta cerrada, sin acceso a medios de comunicación- no se presentó la empresa que construyó la nueva caldera, para explicar por qué no ha funcionado al cien por ciento y sigue emitiendo polvillo al aire.

“Se esperaba que la empresa Dallas -Boyler mexicana diera un dictamen de por qué no funcionó al 100% como ellos lo habían mencionado. El gerente la protege o no sé qué pasa, pues no tiene nada de malo que ellos se presenten e informen. Gracias a la insistencia de los ciudadanos se consiguió ese recurso, por ello es necesario que la propia empresa informe cómo está operando”.

Aseguró que la nueva caldera, que costó del orden de los 60 millones de pesos, no está operando a toda su capacidad y que el gerente, Rodolfo Villanueva, le explicó al movimiento que se debió a problemas técnicos del ingenio, pero ahora ya no se compromete a que reducir la contaminación.

“Él ya no se compromete a dar ningún porcentaje de la emisión de contaminantes, eso va quedar al libre albedrio de lo que digan las autoridades de la gerencia, entonces nosotros prácticamente no vamos a poder alegar ya nada entonces, es un problema muy grave”.

Estimó que la caldera habría alcanzado sólo el 70 por ciento de su capacidad, dadas las evidencias de contaminación al aire, y ahora ya no hay ningún tipo de compromiso para llegar al 100 por ciento.

“Prácticamente con esto nos callan la boca, CEAMA no dijo nada (en la reunión) y él (el gerente) dice que no están contaminando ya, entonces yo le hice una propuesta, si no está contaminando el ingenio, no tiene ningún inconveniente que las cenizas que caen se las dejemos en su oficina y él dijo que sí, que acepta esa propuesta de dejarle las cenizas en su oficina”.

Lamentó también que la actual gerencia haya ofrecido que el ingenio iba a ser certificado como industria limpia y no se consiguió.

“Vamos a pedir asesoría legal porque este es un hermetismo por parte del gerente y de alguna manera el encerrarse en su burbuja, ya con eso se defiende de que ya no va a haber ningún porcentaje ni compromiso de bajar la contaminación”, finalizó.