Jorge Morales Barud, arriba como candidato a la presidencia municipal con el desgaste natural pero además con las contras, aunque los matiza, el coordinador de esa campaña en la entidad Jorge Meade Ocaranza.
Erick Yair Salgado es sustituido por Fernando Martínez Cué en una negociación confirmada en el último minuto –por no llamarlo segundo- del domingo 15 de abril; la fórmula se sacude un personaje que traía consigo críticas, pero ojo, también estructura partidista.
Los dos punteros en la fórmula por la presidencia municipal de Cuernavaca, quedaron así definidos. Morales Barud nunca renunció a su militancia tricolor, con cuya bandera fue presidente municipal, diputado local, secretario de Gobierno y gobernador sustituto. La carrera es envidiable.
Para la sindicatura se inscribió a Fernando Martínez Cué. Desde la lucha por la candidatura a gobernador, hasta de segundo en la presidencia municipal de Cuernavaca; lo que caiga es bueno diría la abuela. Panista, perredista y ahora priista; esa si que es trayectoria, presencia, y currícula, pero también es incongruencia, engaño y oportunismo.
Enfrente encuentran a un Partido Acción Nacional cohesionado y que ha sabido sumar a los suyos. Marcos Manuel Suarez Gerard y Francisco Sotelo Gil conforman la mancuerna para la presidencia y la sindicatura. En la etapa anterior fue el PRI con Manuel Martínez Garrigós y Humberto Paladino quienes alcanzaron el triunfo. Al hilo, dos ex presidentes de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación han ligado ese espacio en propuesta: la sindicatura.
Por la izquierda José Luis Urióstegui Salgado y Arturo Vázquez Rojas conforman la propuesta de la alianza de izquierda. Urióstegui goza de gran prestigio y su congruencia es una gran carta de presentación, sin embargo su influencia en la estructura del PRD es prácticamente nula.
La apuesta en este caso es al triunfo de Graco Ramírez Garrido Abreu; sin embargo, su equipo y el candidato deben saber y entender que la diferenciación del voto en Morelos es patente y conocida. Con propuesta pero sin dinero será muy difícil, con dinero pero sin propuesta mucho más difícil.
La lucha por la dirigencia en Cuernavaca, bajo los esquemas planteados, pueden complicar o favorecer a los aspirantes al gobierno estatal; los votos aquí sumados pueden definir la inclinación de la balanza. Por ello es tan importante la estabilidad, así como los equilibrios hacia el interior de las planillas y por ende en los grupos partidistas; PRI e izquierdas se ve difícil que lo logren, en el PAN los amarres advierten esa etapa como superada.
Tendremos una elección muy interesante; nadie, absolutamente ningún candidato puede darse por vencedor en este momento. Encuestas o no de por medio, el ejercicio democrático –como debe ser- habrá de definirse con el sufragio y en su caso, con la participación de las instancias judiciales.
Al aire
Felicidades a la colega Guadalupe Juárez, hoy integrante de grupo Radio Centro, quien moderará el primer debate entre los presidenciables; sin embargo, nuestra sobre reglamentación solamente dejará que tengamos más de lo mismo: todo menos debate.
Rondas de posicionamientos, respuestas a preguntas estructuradas por especialistas y académicos, no por periodistas. Análisis de físicos y vestimentas, oratoria y mímica; a la espera de alguna sorpresa que valga la pena.
Al otro día todos habrán de decirse triunfadores; los más mesurados publicarán: el ganador fue México o la democracia.
