Florentino Sorela Severiano tiene 80 años de edad y más de 64 años representando la Danza de los Tecuanes de Tetelpa como parte de una herencia cultural de sus padres y sus abuelos. Desde los 14 años de edad aprendió a interpretar los sones de esta danza, con su flauta de carrizo y su tambor simultáneamente, instrumentos que fueron heredados por su abuelo Ramón Sorela, los cuales a su vez fueron entregados por Lirio Sorela, padre de Florentino, para que continuara con este legado cultural, histórico religioso, dijeron.

El señor Florentino es originario del pueblo de Tetelpa, nació en el año de 1932 y desde el año 1946 ha representado la Danza de los Tecuanes de Tetelpa, misma que es de origen prehispánico pues está conectada con la adoración al tigre o jaguar.

Agregó que esta danza se remonta al tiempo de los pueblos olmecas y su mito totémico basado en la unión de un tigre con una mujer. Al llegar la época colonial, la danza se mezcló con elementos y personajes de ese tiempo, como perros de caza y dueños de un rancho ganadero. Cabe señalar que no forma parte del teatro evangelizador de los misioneros españoles, pues no hay invocaciones ni a la virgen ni a Dios.

El argumento de la danza gira en torno al dueño de una hacienda ganadera llamado Salvadorchi, quien llama a su ayudante caporal llamado Mayeso para informarle que un tigre anda por los alrededores de la hacienda y que se está comiendo a sus animales, por lo que es necesario cazarlo. Inmediatamente Mayeso sale a localizar al tigre para darle muerte, pero no logra localizarlo y llama a cuatro viejos del pueblo para que lo acompañen a buscarlo, pero tampoco lo encuentran. Los viejos se llaman el viejo flechero, el viejo lancero, el viejo chancuasclero y el viejo Pascacio.

Mayeso le habla a otro personaje llamado el viejo rastrero que se hace acompañar de unas perras y de un tirador que tiene las mejores armas de fuego, y éstos sí logran matar al tigre. Salvadorchi les paga a todos por sus servicios y se reparte la piel del animal entre los concurrentes.

Un músico generalmente es el director de la danza, que toca con una mano una flauta de carrizo y es acompañado de un tambor de madera y piel de chivo. Toca nueve piezas en total y con estos sones bailan los danzantes.

El señor Florentino recientemente recibió su nombramiento oficial como un “tesoro humano vivo”, formando parte de los testimonios de las tradiciones culturales vivas y del talento creativo de grupos, comunidades o individuos del pueblo de Tetelpa.

Por último, el señor Sorela hizo un llamado a las comunidades para que apoyen y participen en este tipo de actividades que poco a poco se van quedando en el olvido, al mismo tiempo que informó que hace unos días registró los sones de la danza, la coreografía, la escenografía y el vestuario como “Danza de los Tecuanes de Tetelpa” y recibió su certificado del Registro Público del Derecho de Autor, a fin de poder dejar su legado histórico de manera oficial y legal a los miembros de su familia. Anunció que debido a su avanzada edad, a partir del mes de diciembre del presente año nombrará como sucesor de la Danza de los Tecuanes de Tetelpa al menor de sus hijos, de nombre Roberto Sorela, al cual ya está capacitando para que aprenda a interpretar los sones y a partir del próximo 7 de diciembre, fecha en que se celebra a la Virgen de la Concepción, patrona del pueblo de Tetelpa, sea partícipe.