Astudillo Flores (quien ya ocupó el mismo cargo en los dos últimos años de la administración de Nelson Torres Mondragón –2006-09– y uno en la administración anterior de Alberto Cabrera), explicó que apenas el martes le ofrecieron el cargo.

“Ayer (el martes) me informaron en el Ayuntamiento que hoy iba hacerse el cambio de administración en el mercado; se hizo la toma de protesta como a las ocho, nueve de la mañana aquí en el mercado”, declaró.

De las razones del cambio sólo comentó que había señalamientos acerca de los baños y el ambulantaje.

Adelantó que hará un programa para alinear a los comerciantes, “que mucho nos lo han pedido”, así como controlar el ambulantaje, “que es muy conflictivo en esta área de mercados”.

Reconoció que la problemática prácticamente es la misma que cuando ocupó el cargo en trienios anteriores. “La problemática es la misma: los comerciantes, el alineamiento, el área de los baños. Pienso que la próxima semana se empieza a trabajar para mejorar los baños; en el ambulantaje vamos a poner mano dura, mano fuerte y aplicar simplemente la ley de mercados que establece que no pueden hacer el comercio ambulante.”

Por su parte, Díaz Cerón, entrevistado por separado, dijo desconocer con precisión las razones de su separación del cargo, aunque confió en mantenerse en el gobierno en otra área.

Dijo que apenas el martes le informaron del movimiento que tuvo que acatar. Consideró que fue un grupo minoritario el que se quejó de él para que lo depusieran del cargo, entre los que mencionó a Ray Pérez, el señor Chuy y Juana “la zapatera”.

Apuntó que esperará su reacomodo, que podría darse en el sistema DIF u otro lado que el podría proponer. “Los cambios son buenos”, se consoló.

En una encuesta entre los locatarios, la mayoría coincidió en que no sabían que se había realizado el cambio. “No nos avisaron”, dijeron, y cuestionaron el nombramiento de Astudillo Flores.

Señalaron que la inseguridad, el ambulantaje y la falta de alineamiento, así como las malas condiciones de los baños, son problemas inmediatos que se tienen que atender.