En conferencia de prensa, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Servicios y Turismo, Marcos García Álvarez, dio a conocer con respecto al amparo directo que interpusieron los comerciantes Pedro Sánchez, Marcos García, María de los Ángeles Sotelo y Blas Tirado, integrantes de la Canaco, que el juez federal de distrito Óscar Rodríguez Álvarez respondió -al abogado patrono Alberto Salgado- que no fue concedido.

“Según el criterio del juez, no había elementos suficientes para otorgar el amparo. Esto nos preocupa porque es evidente la violación (a la ley), pues no se puede transitar libremente por la calle, la gente que vive sobre las mismas tienen obstruidas sus entradas, y en mi caso particular, fuimos impedidos para ejercer el trabajo del que vivimos”.

Consideró que el juez no tomó en cuenta las violaciones que de manera “flagrante se observan año con año”. “La normatividad que se encuentra en el bando de gobierno en vigor en la ciudad de Jojutla establece de manera contundente que no se permitirá el comercio ambulante y semifijo en las arterias que fueron demandadas para no ser obstruidas, como Constitución del 57, Altamirano y Josefa Ortiz de Domínguez. Por lo que nos manifestamos en contra de dicha resolución de desechamiento de nuestra demanda de amparo, que ocurrió el 27 de diciembre 2010”.

Deploró que no se viva en un “estado de derecho”, como lo dicen las autoridades de los tres niveles de gobierno. “Nos queda claro que ese tan cacareado estado de derecho es una utopia, un sueño guajiro, que en la práctica no se da. Ya queda impune la agresión a las garantías individuales, en beneficio de unas personas que ponen un tianguis que dura muchos días. Solamente por medio de presión de intereses económicos de grupos identificados plenamente y que son quienes tienen beneficios económicos en esta feria siga siendo impune. Además, no rinden informes de los beneficios”.

Dijo que lo que sigue es que puedan acudir al Tribunal Contencioso Administrativo para obtener un resarcimiento al patrimonio, pero eso será valorado por cada uno.

García Álvarez negó que esto sea un triunfo indirecto para el Ayuntamiento, pues aseguró que seguirán pugnando porque la feria se quite de las calles.

“En todo caso, perdimos una batalla, no la guerra. Para la Canaco no es un asunto concluido; en cuanto una autoridad afecte los intereses de los agremiados, la cámara seguirá dando la cara y seguirá apelando a la ley. Hay varias alternativas y no vamos a quitar el dedo del renglón en la reubicación de la feria.”