Jojutla.- Debido a que se está capacitando al personal que lo va a operar, el programa de prevención de accidentes a través de la implementación del alcoholímetro podría reanudarse en aproximadamente un mes.

El coordinador de jueces cívicos del municipio, Rafael Chavarría Bahena, dijo que los operativos se dejaron de realizar desde diciembre del año pasado e informó que actualmente los responsables están recibiendo capacitación en la Secretaría de Salud.

“Estamos en una reestructuración del programa de alcoholimetría, donde, de acuerdo a la nueva normatividad que nos exigen, debe capacitarse a todo el personal, no solamente a la policía vial, como se venía practicando”.

Aseguró que ahora en la operación de este dispositivo se aplicará la normatividad federal.

“A nivel federal viene una homologación de la operatividad en el alcoholímetro, para que en toda la república, en todos los estados, en todos los municipios, se opere de la misma forma. Esta homologación trae como consecuencia que no se paguen las multas, sino que se pague con arresto de 36 horas, pero eso lo estamos analizando como municipio”.

Estimó que en un mes podría reanudarse su aplicación, aunque con la nueva reglamentación, que incluye una persona que vigile que no se violenten los derechos humanos, “como en algunos otros municipios”.

Dijo que el alcoholímetro no debe ser visto como una herramienta para intimidar, sino para tomar conciencia.

“Muchos tienen el concepto equivocado de decir: es que ya no quieren que tome. La ciudadanía es libre de tomar, lo único que deben de tener conciencia es de que si van a manejar que no tomen”.

Interrogado acerca de si ha escuchado versiones de que una patrulla se dedica a perseguir automovilistas para obtener algún beneficio, invocando el operativo alcoholímetro, dijo no tener conocimiento de ello, pero sí, que cuando es evidente que un vehículo zigzaguea, debe ser detenido por la autoridad. Asimismo, reconoció que cuando estuvo en operación el alcoholímetro, había quejas de abuso de las autoridades de tránsito, por lo que algunas de éstas se están siguiendo a través del área de asuntos internos de la dirección de policía, pero también se dieron casos en los que los automovilistas mentían para no pagar la sanción.

Al respecto, comentó que también las sanciones, que en Jojutla son de 7 mil 304 pesos, por conducir en estado de ebriedad –pero que se pueden incrementar por diversos cargos- se tienen que analizar. No obstante, opinó que al final, “la ciudadanía tiene que entender que es por su propio bien”.

Vale mencionar que el 5 de octubre de 2016, el ayuntamiento de Jojutla informó de manera oficial, a través de un boletín, sin número, que desde que comenzó la actual administración, hasta el mes de agosto, se levantaron 430 infracciones por conducir en estado de ebriedad, ingresando a tesorería 2 millones 987 mil 336 pesos, en razón de que 394 cubrieron su pago, 30 obtuvieron descuento y seis vehículos más se mantenían todavía en el corralón.

El mismo documento señala que según los Servicios de Salud Morelos, en México al año mueren aproximadamente 24 mil personas en accidentes automovilísticos relacionados con el consumo del alcohol; se estima que cada día son hospitalizadas mil 700 personas con lesiones severas y más de 100 enfrentan discapacidad permanente por la misma causa, por lo que los accidentes representan la segunda causa de orfandad.