Recientemente Servicios de Salud de Morelos dio a conocer la importancia de la prevención de esta parasitosis, ya que suele incrementar en temporada de calor, y se informó que se promovería el reforzar la vigilancia en escuelas.

Al respecto Tere Núñez, jefa del departamento de apoyo técnico de la Dirección de Educación Primaria del IEBEM, explicó que hasta ahora no tienen alerta o aviso alguno con respecto a posibles brotes de “piojos” en los niños.

Comentó que como parte del programa de formación de valores y hábitos en salud, se recomienda a los niños algunas actividades de higiene, como bañarse diariamente, el lavado de manos y dientes, se les pide a los papás que envíen a sus hijos al colegio limpios, con uniforme, entre otras cosas.

Recordó que para los docentes es conocido que en la temporada de calor puede aumentar el número de casos de pediculosis, por lo que dejó claro que se pide la colaboración de los padres de familia en fortalecer la higiene personal.

“Los piojos son evidentes y lo único que podemos hacer es pedir a los papás que hagan lo que les corresponde porque al maestro no le daría tiempo revisar todos los días cabeza por cabeza de cada alumno”, dejó en claro la funcionaria, al sostener que no se podría establecer algún filtro o actividad similar, porque en el caso de la pediculosis, sólo se puede actuar con higiene y en casa.

Hizo notar que esta tarea es del sector salud, donde pueden otorgar el champú o algún medicamento para matar a los piojos y liendres, por lo que en las escuelas se les recomienda acudir a los centros de salud.

La profesora destacó que ahora hay pediculosis en escuelas particulares, en públicas, en universidades y en comunidades rurales, pues “ya no es una afección de estratos social, ni de edades, hablar de estratos sería más que discriminatorio”.

Tampoco hay una fecha específica, aunque se recrudece en temporada de calor, se observan prácticamente durante todo el año.

Cuando un director reporta que hay un caso de pediculosis, se llama al centro de salud para que colaboren con pláticas a los padres de familia, con el fin de controlar el problema, pero admitió que muchas veces los casos no son reportados por los propios padres de familia.