La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos, Lucero Benítez Villaseñor, reveló que prevalece la violencia en los centros educativos, e incluso han aumentado los casos en los que los estudiantes graban peleas y suben esos videos en internet. Entrevistada al respecto, la secretaria de Educación, Beatriz Ramírez Velázquez, indicó que en el sector educativo se buscan alternativas para atender y prevenir este tipo de prácticas violentas.

Dio a conocer que junto con el comisionado de seguridad pública Jesús Alberto Capella Ibarra, se trabaja en la propuesta de poner en marcha un programa para crear lo que se denomina “patrulla juvenil”, que se activará como piloto en algunos centros educativos, considerados de mayor incidencia.

Con este modelo, que ya se aplicó con éxito en Tijuana, se pretende invitar a los jóvenes a conformar grupos, que reciban formación y capacitación en prevención.

“Es un esquema en el que tú, más allá de ver al policía que te pueda agredir o violentar, que se sensibilice sobre cómo puede el joven incidir en disminuir las prácticas violentas”.

Incluso la propuesta ya fue presentada a la Secretaría de Educación en el Consejo estatal contra las Adicciones, por lo que se busca aplicar el pilotaje este mismo año escolar.

Los estudiantes tomarían talleres, realizarían prácticas en diversos temas como el de las drogas y sus efectos, y diversas formas de prevenir la violencia. Su participación sucedería, no sólo dentro de las escuelas, pues refirió que también hay un programa de prevención de la delincuencia, que es federal.

La secretaria insistió en que el problema de la violencia en sus diversas formas o expresiones (como el acoso escolar) es integral, no sólo se genera en las escuelas, sino está en todas partes, de ahí que reiteró el llamado a padres de familia a que colaboren en la formación de valores, que estén atentos a sus hijos y que cuando detecten casos, los denuncien o los notifiquen a las autoridades escolares.

Cuestionada con respecto al fenómeno de la grabación con teléfonos celulares y su publicación en redes sociales de internet, la funcionaria señaló que se trata de un asunto complejo, en el que los jóvenes, con o sin permiso de los padres, tienen acceso a la tecnología.

De tal manera que desde su punto de vista, lo que queda por hacer es lanzar una convocatoria a que los propios alumnos y padres de familia hagan conciencia sobre los beneficios y los efectos contraproducentes de estas herramientas tecnológicas.

Destacó el papel de los medios de comunicación para difundir que los jóvenes no vean en las redes un medio para difundir más violencia, sino valores positivos.

Ramírez Velázquez indicó que las denuncias pueden ser presentadas a la Secretaría de Educación del estado, que se encuentra en proceso de creación de un micro sitio de internet para reportar los casos.