Diversos sectores de la población manifestaron a esta Redacción la preocupación e incertidumbre que se está viviendo por esta situación.

Por ejemplo, empresarios de la región, que pidieron omitir sus nombres, deploraron que apenas este martes autoridades estatales y federales hayan declarado que el índice de inseguridad en Morelos no sea grave, cuando en la región sur las extorsiones, los secuestros y más recientemente, la exigencia de “pago de piso”, están a la orden del día.

“Lamentablemente, hablan que el estado de Morelos es tranquilo; que no hay ningún problema de inseguridad o es el mínimo, cuando la verdad es totalmente diferente y distinta”.

Dijeron que es frustrante que a ese nivel “hablen con esa facilidad e irresponsabilidad”, porque en realidad, en la zona hay sicosis creada por la delincuencia y por la impunidad que impera en esta región. “Las autoridades piensan que Cuernavaca es todo el estado de Morelos, cuando no es así, por ello, le dan menos atención y cuidado a esta zona”.

Señalaron que es lamentable que no sólo empresarios, sino particulares o profesionales que se han esforzado toda su vida, pierdan su patrimonio o la vida misma en unas horas.

“Estamos estresados, angustiados, hay una gran sicosis que va creciendo como una bola de nieve porque lamentablemente las autoridades por todo le echan la culpa a la mafia y no se investiga y no se hace nada, absolutamente nada, y la gente que ha sido afectada lamentablemente ha tomado la actitud de no denunciar y entonces esto es sumamente peligroso”.

Por otra parte, ninguna autoridad está actuando, puntualizó otro; ni a nivel federal ni estatal ni municipal. “Estamos solos, la sociedad está sola, peor aún, las policías parece que están coludidas, pues recientemente se detuvo a un policía en activo en una casa de seguridad de criminales y hace unos días se fugaron unos reos de la cárcel de Jojutla”.

A los empresarios los presiona la secretaría de Hacienda y el Seguro Social por un lado, y por el otro, la delincuencia organizada, que está empezando a cobrar “derecho de piso”, esto nos pone en una situación de indefensión, precisaron.

Mucha gente está cambiando de giro, cerrando sus negocios o emigrando a otros estados más seguros, afirmaron, porque la situación ya es insostenible.

Y es que no sólo empresarios han sido objeto de estos hechos criminales, sino también profesionistas, políticos, maestros y hasta simples comerciantes.

Diversas denuncias hechas de manera anónima a este medio, revelan que personas de toda condición social están siendo víctimas de estos delitos.

De acuerdo con los testimonios de los vecinos de la región, casi la totalidad de los casos de secuestro no han sido denunciados, aunque se ha pagado el rescate; y en cuanto a las extorsiones telefónicas, éstas van desde los 15 mil hasta los cientos de miles de pesos.

Comentarios de los habitantes, señalan que en Tehuixtla, municipio de Jojutla, Puente de Ixtla, Tlaltizapán (en El Mirador y Santa Rosa 30), Tlaquiltenango, Zacatepec y el resto de la zona sur y poniente, han sido castigados con un gran número de secuestros y extorsiones, de modo que incluso los lugareños han cambiado algunos hábitos de vida.

Un tema muy comentado es el de plagio de jóvenes estudiantes, cuyos padres han sido obligados a pagar enormes sumas de dinero para verlos liberados.

En ninguno de los casos se tienen detalles, ya que los familiares están amenazados con más hechos de este tipo si presentan denuncia.

A estos delitos se suman la amenaza para pagar derecho de piso. Comerciantes de Puente de Ixtla han sido objeto de esta práctica, así como varios más en Zacatepec y Jojutla.

Negocios de esta región, han cambiado de giro, se han puesto en venta o han cerrado ante estas amenazas.

Mientras los crímenes se siguen incrementando, las autoridades dicen que requieren de la denuncia para actuar, mientras que las víctimas prefieren mantenerse en silencio y en todo caso, cambiar de lugar de residencia para no verse más afectados por esta amenaza.