La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente detectó la tala ilegal de 21 árboles de encino, madroño y cedro blanco en un predio ubicado en el paraje conocido como “El Mirador”, en el municipio de Hueyapan
En otro operativo, logró desmantelar un centro de almacenamiento y transformación de materias primas forestales clandestino en el municipio de Huitzilac
Por el derribo de 21 árboles de encino, madroño y cedro blanco, sin contar con la autorización correspondiente de la autoridad ambiental, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró de manera total temporal un predio en el municipio indígena de Hueyapan, Morelos.
El pasado 2 de septiembre, la Profepa recibió un reporte del ayuntamiento de Hueyapan sobre la tala irregular en el paraje conocido como “El Mirador”. Como parte de la inspección realizada el 4 de septiembre, se constató que los árboles derribados no tenían la marca oficial de autorización y que el responsable del predio no presentó documento alguno que acredite el aprovechamiento legal de los recursos forestales.
Con fundamento en la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable y en el Código Penal Federal, se impuso como medida de seguridad la clausura total temporal del predio, mediante un sello.
El municipio indígena de Hueyapan se ubica dentro del área de influencia del Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl, una región considerada crítica por la incidencia de tala clandestina y el cambio de uso de suelo forestal, principalmente para el establecimiento de cultivos como ciruela y aguacate, lo que ha generado un deterioro significativo en los bosques locales.
La Procuraduría iniciará el procedimiento administrativo correspondiente y mantendrá acciones de inspección y vigilancia en la zona, con el objetivo de proteger los recursos naturales y prevenir el avance de la deforestación ilegal en el estado de Morelos.
Desmantelan aserradero en Huitzilac
Como parte de las acciones permanentes para combatir la tala ilegal en el Bosque de Agua, la Profepa realizó operativos en: Xalatlaco, Estado de México, y Huitzilac, Morelos. Como resultado, fueron desmantelados tres aserraderos clandestinos y se aseguraron vehículos, maquinaria y 35.119 metros cúbicos (m³) de madera.
El primer operativo se llevó a cabo el 12 de septiembre, en el municipio de Xalatlaco, Estado de México, en dos aserraderos ilegales. Se aseguraron dos torres de aserrío, dos carros de empujón, dos motores eléctricos, tres bancos metálicos y uno de madera; una canteadora, cuatro vehículos, 31 piezas en rollo de oyamel (13.923 m³), 367 piezas aserradas de oyamel (13.646 m³) y 593 piezas aserradas de pino (7.550 m³).
La maquinaria fue trasladada para su resguardo a las instalaciones de Probosque en Metepec. En esta acción participaron 300 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional, la Policía Estatal, FGR y la Profepa. Los dos aserraderos fueron desmantelados.
En otro operativo, hecho el 11 de septiembre, se desmanteló un centro de almacenamiento y transformación de materias primas forestales clandestino en el municipio de Huitzilac, Morelos, también ubicado dentro del Bosque de Agua.
El sitio fue clausurado y desmantelado por no contar con autorización de funcionamiento emitida por la Semarnat. Se aseguró una torre de aserrío con motor eléctrico de 25 H.P., un carro de empujón y una sierra de cinta. La maquinaria fue trasladada a las instalaciones de la Profepa en Morelos.
Este operativo contó con la participación de 43 elementos de la Guardia Nacional, Secretaría de la Defensa Nacional, Secretaría de Marina y la Profepa, quienes realizaron labores de inspección y aseguramiento.
El Bosque de Agua, que se extiende por la Ciudad de México, Estado de México y Morelos, es una región estratégica para la captación de agua y el equilibrio ecológico.
Los operativos forman parte de una estrategia permanente de inteligencia, vigilancia y clausura de aserraderos ilegales, con la cual se ha reducido la tala clandestina en la zona. Tanto Xalatlaco como Huitzilac son consideradas zonas críticas forestales.
La Profepa continuará trabajando en coordinación con autoridades federales y estatales para proteger los recursos forestales del país y garantizar la conservación de esta región vital.
En el municipio de Huitzilac, la Profepa desmanteló un aserradero clandestino en el que aseguró maquinaria diversa.