La fiscalía busca dar certeza a la identificación y entrega del cuerpo de la menor.
La Fiscalía General de Morelos solicitó el apoyo de su homóloga de Chiapas para obtener información sobre la familia de Imelda, la niña indígena tzotzil de cinco años que murió atropellada el pasado 27 de agosto en la glorieta de La Luna, ya que hasta el momento carece de datos concluyentes que confirmen el parentesco con la mujer que se identificó como su tía y quien reclamó la entrega del cuerpo.
En reunión de trabajo con las personas titulares de la Comisión de Derechos Humanos, el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, el Instituto de Pueblos y Comunidades Indígenas y Afromexicanas de Morelos y la Procuraduría de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, el fiscal estatal, Édgar Maldonado Ceballos, detalló las diligencias que se realizan en torno al caso, particularmente para la localización de la familia directa de la víctima y la entrega del cuerpo.
Aseguró que la FGE mantiene coordinación con la Fiscalía de Chiapas para realizar actos de investigación en aquella entidad sobre el origen de la familia, con el propósito de complementar la información y dar certeza jurídica a la identificación y entrega del cuerpo de la víctima.
En su intervención, la coordinadora de Servicios Periciales, Verónica Gomar Paredes, explicó que el cuerpo de la pequeña se encuentra dignamente resguardado en el Servicio Médico Forense, y explicó que los estudios de perfiles genéticos practicados a posibles familiares no descartan el parentesco, pero tampoco son concluyentes, como es el caso de la mujer que afirma ser tía de la pequeña -con quien bailaba y pedía monedas a los automovilistas en los cruceros- y quien reclama la entrega del cuerpo para darle sepultura.
Detalló que en virtud de que estos posibles familiares no constituyen una línea directa de ascendencia, se realizarán más pruebas y diligencias por parte del Ministerio Público.