El Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa resolvió que es fundada la queja interpuesta contra el Juzgado Quinto de Distrito, que determinó indebidamente desechar el juicio de garantías.

“Si el acto reclamado (es) la omisión de dar intervención al quejoso como víctimas u ofendido en un procedimiento penal, y aduce ser el denunciante y tener reconocido el carácter de ofendido en otros derivados de los mismos hechos delictivos, debe admitirse la demanda; máxime que al momento de su presentación no se advierte si la autoridad investigadora fue omisa en darle intervención o, bien, existe una negativa expresa para reconocerle tal carácter”, se estableció en el resolutivo.

En consecuencia, el juzgado federal deberá de admitir la demanda de amparo, que tiene como propósito buscar que la justicia federal ordene resarcir las violaciones de los derechos cometidas en agravio de la familia de Jethro y que se reponga el procedimiento, es decir, que se repita el proceso judicial contra los policías imputados y, en su caso, sean sentenciados.

Y es que el pasado 2 de julio, un tribunal de juicio oral determinó, por falta de elementos y a petición de la fiscalía estatal, sobreseer la causa penal contra cuatro policías municipales de Cuernavaca acusados de presunto abuso de autoridad por la detención arbitraria de Jethro, y que derivó en el homicidio del joven a manos de un grupo de oficiales militares.

El 1 de mayo de 2011 Jethro Ramsés Sánchez Santana fue detenido por la Policía municipal, tras una riña en el área de alimentos de la Feria de Cuernavaca. Según la Policía, Jethro habría dicho pertenecer al Cártel del Pacífico Sur y habría amenazado de muerte a los elementos municipales.

El joven, de apenas 25 años, fue entregado a la Policía Federal y luego a elementos del 21 Batallón de Infantería, para luego ser torturado y asesinado dentro de las instalaciones de la 24 Zona Militar y su cuerpo inhumando clandestinamente en un paraje de Atlixco, Puebla.

Tras la detención, el joven permaneció desaparecido y a pesar de que su familia lo buscó, las autoridades locales y federales negaron tenerlo bajo custodia. Amigos y conocidos del joven fueron testigos de la detención y debido a que el caso cobró revuelo en los medios de comunicación, la presión obligó a destrabar la investigación y se conociera el fatal destino de Jethro, cuya familia ha defendido su honorabilidad y asegurado que no tenía relación alguna con el crimen, por el contrario, era un joven estudioso y emprendedor

A más de cinco años de los hechos, continúan en curso los procesos penales contra un grupo de policías federales, tres oficialías militares, un coronel y el ex titular de la 24 Zona Militar, Leopoldo Díaz Pérez.