Durante su vista a Morelos, el defensor de los derechos de los migrantes consideró que ni los logros en seguridad del gobierno mexicano, ni los acuerdos trilaterales fueron hechos para atender las necesidades de las personas y sólo responden a los intereses y reclamos de los grandes capitales.

Entrevistado en el Foro Internacional sobre los Derechos Humanos que realizó el Gobierno de Morelos con la Fundación Baltazar Garzón, explicó que “el modelo neoliberal capitalista donde vivimos, toma en cuenta el capital financiero, pero no las personas, por eso no es de extrañar, ellos hablan de desarrollo, ¿pero para quién? Hablan de ganancias, ¿pero para quién?, para unos cuantos, para ese uno por ciento, pero los demás no les importa”.

El director del albergue Los Hermanos del Camino, que atiende principalmente a migrantes centroamericanos que se dirigen a los Estados Unidos, lamentó que en la reunión entre México, Canadá y Estados Unidos, el tema migratorio no haya sido tomado en cuenta.

Acusó a los mandatarios de centrar su atención sólo en el norte del Continente Americano, “toda la atención para el norte, para nuestros hermanos de Centroamérica ni siquiera una mención. México, Estados Unidos y Canadá hacen su propio mundo y justamente en el sur es donde empieza la causa de la migración”.

Lamentó que los mandatarios de los tres países sean injustos con los trabajadores migrantes, “en este caso hubo un olvido total a algo que es de justicia, el sistema neoliberal capitalista ha generado este éxodo, esa es la principal causa, y para ellos no hay atención. Creo que es una omisión gravísima”.

Sobre el tema de la seguridad, el padre Solalinde expresó: “hemos avanzado en la cuestión de seguridad nacional, pero no de la seguridad humana, ni tampoco de la protección de migrantes”.

Adelantó que el próximo 9 de abril participará en un foro que se realizará en el Senado de la República, con el propósito hablar de la autoprotección de las personas y de los migrantes, situación que el gobierno ha preferido dejar de lado.

Tras la detención de Joaquín Guzmán Loera, el sacerdote opinó: “sirve, pero falta que detengan todavía a otros como Romero Deschamps y otros políticos que están por ahí pendientes también”.