Los abanderados, presidencial y al gobierno estatal, fincan en los jóvenes la reserva estratégica para detonar el progreso de Morelos y México.

México y Morelos no merecen un horizonte de rezago, pobreza e inseguridad, sino un cambio con rumbo, paz, orden y progreso, coincidieron los candidatos Enrique Peña y Amado Orihuela.

Al arrancar su campaña y acompañado de Peña Nieto y del líder nacional del tricolor Pedro Joaquín Coldwell, Orihuela Trejo sostuvo que el PRI tiene el reto de concretar la esperanza de seguridad, certidumbre y desarrollo de los morelenses.

Junto con el aspirante presidencial comprometieron una gran alianza, para que desde los gobiernos federal y estatal, se finque con unidad y trabajo, un nuevo destino de bienestar.

Ante miles de priistas que se dieron cita en el Centro de Convenciones del World Trade Center, el abanderado al gobierno del estado enfatizó que cimenta en la salud, educación y justicia social, los ejes rectores de su plataforma política.

"Vamos a apoyar con desayunos y útiles escolares a los niños y jóvenes de escasos recursos; y a las madres, borraremos su rostro de preocupación cuando sus hijos se enferman, con clínicas abiertas las 24 horas", ofreció Orihuela.

Con espíritu de lucha, agregó, los morelenses saldrán adelante luego de 12 años de desesperanza, violencia, incertidumbre y rezago; "la esperanza está sembrada en Morelos y en nosotros está su destino, el cambio al que se aspira".

Orihuela Trejo y Peña Nieto reflexionaron sobre el papel que el PRI asume en estos momentos de transición, y dijeron que su propuesta se orienta a dar certidumbre al empleo, bienestar a los adultos mayores, a las madres solteras y a los campesinos.

Enfatizaron que, la divisa que tiene el país y Morelos son sus jóvenes, a los que hay que darles la posibilidad de crecer en lo laboral y educativo, porque son sin duda la reserva estratégica para detonar a todo México.

El candidato presidencial Enrique Peña Nieto, en su oportunidad, destacó que a través del Programa Oportunidades, emanado de un gobierno priista, México dejará atrás el rostro de pobreza que hoy tiene.

"Todos los programas sociales se van a mantener, se van a fortalecer, se van a ampliar, porque éstos son de los mexicanos, no de los partidos políticos, y es ahí donde vamos a apostarle a la justicia social", puntualizó Peña Nieto.

Se comprometió a que desde la Presidencia de la República y Amado Orihuela desde la gubernatura de Morelos, van a cambiar pobreza por bienestar, rezago por progreso, incertidumbre por certeza y violencia por seguridad.

"Como Presidente de la República le voy a cumplir a Morelos y a México, y porque el PRI sabe asumir compromisos y cumplirlos, vamos por un cambio responsable y con rumbo", puntualizó Enrique Peña Nieto.

Concluyó en su intervención, que México no puede seguir al garete ni manejado desde la improvisación, sino con gobiernos eficaces que garanticen certeza y seguridad "y ese es el cambio que el PRI ofrece: con paz, orden y progreso".