El también presidente de la Junta Política y de Gobierno dijo desconocer del informe que la Procuraduría entregaría al Congreso, pues fue una solicitud hecha por un solo diputado, Antonio Domínguez Aragón, y respaldada por la Diputación Permanente.

A su parecer, comentó que la intención de conocer del trabajo realizado por la fiscalía morelense en los últimos cuatro años no tiene otra más que volverlo un asunto político e insistir en la remoción del procurador Pedro Luis Benítez Vélez.

Es que dijo que el diputado Domínguez Aragón no pertenece a la Comisión de Seguridad y aunque cualquier legislador tiene el derecho a pedir información, es muy extraño que se haga desde un integrante de la Diputación Permanente.

“Me parece que es más bien una posición política, de tener elementos para presionar o ejercer un tipo de… cómo decirlo... de chantaje hacia el gobierno, hacia el procurador. Habrá que ver con el informe que se les dé qué uso le dan a esa información”.

El diputado panista insistió en que su bancada respalda el trabajo realizado por el fiscal Benítez Vélez, ya que ha entregado buenos resultados y no existe razón para su remoción.

“Lo que nosotros observamos es el trabajo y si en el gobierno hay alguien que ha entregado trabajo no importa en qué dependencia esté, yo no veo la razón por la que se tenga que pedir su cabeza, cuando hay otros estados y municipios en donde la inseguridad se ha incrementado y no por eso se ha pedido la cabeza del secretario o de seguridad”.

Luis Miguel Ramírez Romero dijo que estará atento a lo que diputados de oposición hagan con la información obtenida de la Procuraduría General de Justicia, sobre todo porque se trata de todos los datos relacionados con la violencia registrada en el estado pero durante el gobierno actual, a medida de crítica.