En este contexto, Ocampo Gutiérrez hizo énfasis en que el PRI deberá de ser transparente, “cosa que no ha ocurrido en los últimos años y para ello es necesario transparentar las finanzas, por lo que solicitaré a la nueva dirigencia una auditoría para que nos digan en qué se utilizó el dinero, porque no sabemos su destino y es importante darle certeza a la militancia”.

La ex dirigente y ex diputada local, ahora secretaria general del organismo de mujeres a nivel nacional (ONMPRI), felicitó a quien será el nuevo dirigente, Amado Orihuela Trejo, y destacó la importancia del papel que tendrá Georgina Bandera como mujer y representante de jóvenes, lo cual “le dará una visión distinta a esta nueva dirigencia”.

Por su parte, Meade Ocaranza refirió que finalmente se ganó y la nueva dirigencia “resultará legitimada por que al final todos debemos ser ganadores porque somos priistas y deberemos superar esta falta de vacío que hubo en la dirigencia”.

Por lo que aseguró que ahora lo que queda es que el nuevo dirigente convoque a todos los actores, incluidos los candidatos que no ganaron para sumarse al partido y que las posibles irregularidades que se han denunciado no manchen el proceso, ya que “dentro de todo hubo civilidad, participación y hacer un proceso de esta naturaleza no es fácil, por lo que es importante felicitarnos a todos los que estuvieron involucrados. Ahora se cierra un capítulo en el partido, pero se inicia otra etapa importante donde será necesaria la presencia regional con jóvenes, mujeres y nuevos actores para acabar con los agravios e iniciar una época de renovación”.

De su parte, José Manuel García del Río, secretario general de la juventud popular en el estado de Morelos, se dijo “muy contento por el triunfo de Amado Orihuela y Georgina Bandera y ahora, dijo, habrá que redoblar el trabajo porque el verdadero día para que festejemos será en julio del 2012 cuando ganemos los espacios perdidos como la presidencia de la república, el gobierno del estado y presidencias municipales”.

Finalmente, pidió a la nueva dirigencia, ser incluyente y en donde “los jóvenes que somos la generación emergente y que haremos el pacto generacional al relevo de los políticos, podamos participar abiertamente, porque somos una mayoría importante dentro de las estadísticas de la población y para nosotros es importante incluir cuadros jóvenes para ocupar espacios políticos importantes, pero lo que realmente exigimos es trabajo con la sociedad civil para que el PRI se convierta en un vínculo de las necesidades tan lacerantes que hay en el estado y en el país”.