Entre 2014 y 2018, Pío Lorenzo López Obrador, hermano del presidente Andrés Manuel López Obrador y entonces consejero estatal de Morena en Chiapas, presentó únicamente una declaración anual de impuestos, reportando ingresos “en ceros”.
Según el Servicio de Administración Tributaria (SAT), no se registraron ingresos superiores a 400 mil pesos en los años siguientes.
En 2015, año en que recibió sobres con dinero de David León Romero, cercano al gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, Pío López Obrador tenía cinco cuentas bancarias; cuatro no presentaron movimientos y una carecía de estados de cuenta, según información de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) analizada por el INE.
En 2020, Latinus difundió videos donde Pío López Obrador recibía dinero para apoyar al “movimiento” y posteriormente lo entregaba a Morena.
En ese momento, negó haber recibido o entregado recursos, y afirmó haber perdido la libreta conocida como “biblia”, en la que se registraban las aportaciones.
Sin embargo, en 2022 reconoció en una entrevista con Expansión Política que sí recibió dinero destinado a gastos menores del movimiento y su entrega a Morena. Tras esto, se negó a responder un requerimiento del INE alegando su derecho a no autoincriminarse.
La Fiscalía General de la República (FGR) inició una investigación pero la cerró, argumentando que los videos podrían haber sido alterados y que no se podía determinar la fuente, fechas o lugares de las grabaciones.
El INE continuó la investigación, enfrentando obstáculos legales para obtener información de la FEPADE y del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México.
Finalmente, el Consejo General del INE declaró infundado el procedimiento administrativo sancionador electoral contra Pío López Obrador, Morena y David León Romero, pese a que la Unidad de Fiscalización señaló la posible existencia de un sistema paralelo de financiamiento.
Algunos consejeros lamentaron las limitaciones legales del INE y la falta de pruebas recabadas por la FGR.