En el arranque de su campaña presidencial en Fresnillo, Zacatecas, la candidata Xóchitl Gálvez, abanderada por la coalición Fuerza y Corazón por México, compuesta por el PRI, PAN, y PRD, dio inicio oficial a su contienda electoral de cara a los comicios del 02 de junio.

Con una veladora en mano, Gálvez caminó por las calles de Fresnillo, interactuando con familiares de desaparecidos en el estado. Ante militantes y simpatizantes, la candidata presentó su discurso inaugural en el que agradeció a su equipo y dedicó su proyecto a la juventud mexicana.

Al abrazar a Patricia abrazo a miles de familias mexicanas que sufren por la violencia y la inseguridad.

Yo sí pondré a las víctimas y sus derechos como prioridad nacional.

Con el dinero que le quitemos a los criminales, crearé el Fondo Nacional de Atención a Víctimas.

Vamos… pic.twitter.com/aqmEiMP8SF

— Xóchitl Gálvez Ruiz (@XochitlGalvez) March 1, 2024

En el escenario, Leticia Castañeda Cruz, tía de un desaparecido en Zacatecas, destacó los alarmantes índices de desapariciones en la región y urgió a Gálvez a ser parte de la solución. Criticó la gestión actual al cuestionar los informes sobre la disminución de la inseguridad, señalando la necesidad de salir del "hoyo en el que estamos".

Gálvez inició su discurso con un minuto de silencio en respeto a las víctimas de desaparición y asesinato. Aseguró que su campaña se fundamenta en devolver la paz al país y mencionó específicamente a Fresnillo como una ciudad donde la inseguridad causa gran temor.

Enumerando estadísticas de inseguridad a nivel nacional, la candidata criticó fuertemente al gobierno actual, calificándolo como "el sexenio más violento de la historia, con 180 mil muertos". Dirigió también críticas a la candidata oficialista, Claudia Sheinbaum, acusándola de normalizar la violencia y mostrarse indiferente ante el dolor ajeno.

Xóchitl Gálvez propuso un México sin miedo y destacó la importancia de su proyecto de seguridad.

“Sí es posible un México sin miedo. Y lo vamos a lograr”, aseguró.

Hablando por primera vez de forma abierta sobre su proyecto de país, Gálvez aseguró que cómo presidenta, propone un proyecto de seguridad, el cuál “sepa aplicar la fuerza pública” a través de cinco acciones concretas.

1. El ejército dejará de hacer obras públicas y caprichos del gobierno. “Vamos a sacar a soldados y marinos de las tareas civiles, que los distraen de su misión principal: defender a la ciudadania”, declaró Gálvez, antes de cerrar diciendo “a los civiles lo que es de los civiles y a los militares, lo que es de los militares”.
2. Volver a la Guardia Nacional “realmente Guardia”, dándoles la orden de investigar y perseguir a la delincuencia. “¡Se acabaron los abrazos a los criminales. Se les aplicará la ley!”. Por otro lado, dijo que será “realmente Nacional”, porque va a duplicar de 150 mil a 300 mil sus integrantes para que tengan presencia permanente en ciudades afectadas por la violencia.
3. Fortalecer los gobiernos estatales con recursos y la “mejor tecnología” para enfrentar a los criminales.
4. Apoyar a las Policías Municipales devolviendo los fondos federales “para que tengan recursos para prevenir el delito”.
5. Cuidar a los policías y brindarles seguridad social, con un salario digno a nivel nacional “para que tengan una vida mejor. El piso mínimo de seguridad social para policías debe incluir pensiones, seguro de vida, atención médica, becas para sus hijos y crédito de vivienda. Ningún policía debe quedar fuera de la clase media”.

Respecto a de dónde saldrán los recursos, dijo que “dinero hay” y que durante su gobierno no habrá mayor prioridad que la seguridad de los mexicanos.

“Seré una presidente valiente. Para tener un México sin miedo vamos a contener a las organizaciones criminales más violentas y agresivas de nuestro país”.

Gálvez propuso la construcción de una prisión de alta seguridad para disuadir a los delincuentes y enfocarse en contener a las organizaciones más violentas. Además, planteó una nueva etapa de colaboración con Estados Unidos para combatir la importación ilegal de armas.

En cuanto a soberanía, abogó por una colaboración bilateral para contrarrestar el control de carteles en el país. Concluyó comprometiéndose a poner a las víctimas en el centro del Gobierno, haciendo de la búsqueda de desaparecidos una prioridad nacional.