Chávez Traconi, decía tener una licenciatura en Derecho, otra en Relaciones Internacionales y una más en Ciencias de la Comunicación, forjó una fortuna de más de 50 millones de dólares como producto de su carrera delictiva.
Era originario del Puerto de Veracruz, de padre Italiano y madre jarocha; y durante el sexenio de Jorge Carrillo Olea (1994-1998) logró fugarse de la cárcel distrital de Jonacatepec, al falsificar la firma de su hoja de liberación, además de obtener la ayuda de Jesús Javier Rodríguez Robles, en ese entonces director de la cárcel, quien quedó detenido.
Durante su estancia en el Reclusorio Preventivo Norte en junio de 2001, se puso en huelga de hambre para demandar atención médica, pues había perdido alrededor de 100 kilos, y acusó al director de la Unidad Médica del Reclusorio Norte, Juvenal Martínez, de impedir que fuera atendido por un médico particular.
En julio de 2009 en la Cárcel Distrital de Jojutla inició otra huelga para exigir la renuncia de Alfonso Espino Castillo Barrón, pues durante ese mes se llevó a cabo un operativo en el que presuntamente 15 reos fueron torturados.
En junio de 2010 repitió la hazaña para obtener una audiencia con el juez y denunciar presuntas anomalías.
Cabe señalar que en Internet aún hay anuncios de la supuesta empresa con la que cometía los fraudes: Impulsora de Servicios Especializados S. A. de C.V.; además de anuncios en los que buscaba compañía de hombres en libertad, pese a estar tras las rejas.
