Ayala.- Un violento enfrentamiento se registró la noche del lunes  y parte de la madrugada de este martes en la colonia Emiliano Zapata del municipio de Ayala, mejor conocida como “El Chivatero”, entre militantes del Frente Popular Revolucionario (FPR) y el grupo conocido como los Marcelinos, el cual dejó varias personas golpeadas, viviendas destruidas y dos camionetas incendiadas.

De la confrontación se culpan mutuamente ambas agrupaciones, pues por un lado representantes del FPR, en voz de Ignacio Díaz Montes, señalan que fueron los Marcelinos quienes agredieron inicialmente a dos de sus compañeros. Pero por su parte los Marcelinos aseguran que no hubo un enfrentamiento, sino una agresión directa en su contra por parte de esa organización.

Lo anterior ocurre a unos días de que dé inicio el juicio oral por el homicidio del activista del FPR Gustavo Salgado Delgado, en el cual habrán de comparecer testigos de descargo a favor de los indígenas tlapanecos acusados de dicho delito y que son integrantes de la familia Marcelino Mateos.

Los hechos violentos se registraron poco antes de las 21 horas del lunes, cuando integrantes del FPR del campamento del Axocoche incursionaron en la comunidad para atacar a la familia Marcelino y sus seguidores, en el momento en que sostenían una asamblea derivada del aplazamiento de la audiencia realizada por la mañana, según señala el ayudante municipal de El Chivatero Jesús González Morales.

El ayudante señaló que aun y cuando llegaron a tiempo los policías del Mando Único, éstos no intervinieron cuando los del FPR incendiaban las camionetas y cometían destrozos en varias viviendas, entre ellas la de Adelaida Mateos, abogada de los acusados. Asegura que de esta manera tratan de impedir que los testigos de descargo se presenten a declarar a favor de los detenidos.

Algunos testigos refieren que los bomberos de Ayala y de Cuautla -que acudían a apagar los vehículos- fueron recibidos con disparos de arma de fuego, al mismo tiempo que se les impedía el paso con llantas incendiadas en las calles de acceso a la comunidad. Al mismo tiempo numerosas ambulancias y paramédicos de varios municipios acudieron a esa comunidad para atender a los lesionados.

Durante la refriega, numerosos menores de edad fueron rescatados por los policías para ponerlos a salvo en las patrullas.

El grupo de los Marcelinos manifestó su temor a que en las próximas horas se registre un nuevo atentado en su contra, pues aseguran que han recibido amenazas de los del FPR que regresarán para quemar sus viviendas. Mientras tanto, aunque hay presencia de elementos con equipo antimotines, el ambiente es de tensión en esa comunidad.

Quienes se dicen agredidos, pidieron el apoyo de las organizaciones nacionales e internacionales defensoras de derechos humanos para recibir protección, ante la negativa de las autoridades estatales para garantizar su seguridad.