México.- El presidente de Honduras, Porfirio Lobo Sosa, aseguró que la delincuencia organizada ha emigrado hacia su país y en general a todo Centroamérica, conforme aprieta la lucha del gobierno de México contra el crimen.

En conferencia ofrecida en un hotel de Polanco, el mandatario señaló que en parte la delincuencia organizada incide también en la violencia y el acoso que sufren los migrantes hondureños.

Comentó que en el marco de su visita a México para participar en los festejos del Bicentenario de la Independencia, el lunes intercambió puntos de vista con el presidente Felipe Calderón sobre el tema migratorio.

Ambos coincidieron en la necesidad de intercambiar información de inteligencia para identificar a los delincuentes mexicanos que se han trasladado a Honduras y a Centroamérica para continuar sus operaciones.

“Es evidente que mientras el gobierno mexicano más presiona a la delincuencia organizada, sus integrantes se van a Centroamérica. No hay la menor duda de que están buscando lugares para operar”, sostuvo.

Aunque dijo que desconoce a qué cárteles podrían pertenecer los delincuentes de México que operan en su país, aseguró que hay cambios en la manera de operar de los criminales organizados en Honduras y eso se debe a la presencia de los mexicanos.

Lobo Sosa detalló que por esa razón los países de Centroamérica, incluido Nicaragua, están buscando acuerdos para mejorar la coordinación y combatir en una forma más eficaz a los delincuentes.

Reiteró que el acoso y la violencia contra los miles de hondureños que migran rumbo a Estados Unidos es una preocupación compartida por su gobierno y el de México.

El mandatario indicó que además de tratar el tema con el presidente Calderón, el ministro de Justicia de su país, Marlon Pascua, se reunirá con sus homólogos mexicanos para buscar mecanismos que garanticen la integridad física de los hondureños que crucen por México.

Respecto al asesinato de 72 migrantes en un rancho en Tamaulipas, hecho que calificó como lamentable, señaló que por el momento se decidió mantener al hondureño sobreviviente en México para garantizar su seguridad.

En todo caso los dos temas importantes para Honduras son garantizar condiciones económicas favorables para que sus ciudadanos no deban migrar y lograr acuerdos con México para evitar que su tránsito por el país resulte peligroso, externó Porfirio Lobo.

El presidente de Honduras también indicó que continuarán los esfuerzos conjuntos con México para garantizar que no se vuelva a presentar un hecho como el ocurrido el 24 de agosto en Tamaulipas.

En otro tema, Lobo señaló que los países integrantes de la Alternativa Bolivariana para los pueblos de América Latina y el Caribe (Alba), además de Brasil, son los que se oponen a reconocerlo como mandatario legítimo de Honduras.

Porfirio Lobo Sosa resultó vencedor en las elecciones presidenciales celebradas el 29 de noviembre de 2009, tras la expulsión del poder y del país del entonces mandatario Manuel Zelaya, en junio de ese año.

En relación con esa situación aseguró que su gobierno, iniciado en enero de este año, ya cumplió con los requisitos del Acuerdo de Tegucigalpa y San José para volver al seno de la Organización de los Estados Americanos (OEA).

Sin embargo consideró que algunos intereses geopolíticos se oponen a ese reconocimiento porque Nicaragua y algunos países de Sudamérica se niegan a dar el aval.

Ante la insistencia de los reporteros, el jefe del Estado hondureño reconoció que específicamente se refiere a Nicaragua, Bolivia, Ecuador y Venezuela, así como Brasil.

El mandatario hondureño insistió en que su gobierno emanó de un proceso electoral legal que se inició en 2008, antes de “los hechos de 2009” y con los que no tuvo ninguna relación.

Por ello insistió en que la comunidad internacional debe reconocer a la brevedad los esfuerzos de su gobierno para volver a la OEA.