El Comando Central de Estados Unidos informó este viernes que llevó a cabo ataques contra más de 70 objetivos del Estado Islámico (EI) en Siria, como represalia por la muerte de dos soldados estadounidenses ocurrida el pasado sábado en Palmira.
Horas antes, el jefe del Departamento de Guerra, Pete Hegseth, anunció el inicio de la llamada “Operación ataque ojo de halcón”, cuyo propósito es destruir combatientes, infraestructura y depósitos de armas del EI.
Según detalló el Comando Central, fuerzas estadounidenses y jordanas emplearon más de 100 municiones de precisión durante la ofensiva.
Hegseth señaló que la operación es una respuesta directa a la agresión registrada en Palmira, donde murieron los sargentos Edgar Brian Torres Tovar y William Nathaniel Howard, además de un civil estadounidense. En ese ataque también resultaron heridos tres militares.
El funcionario subrayó que la acción no marca el inicio de una guerra, sino una represalia clara, y aseguró que Estados Unidos mantendrá su postura firme en la protección de su personal.
Por su parte, el presidente Donald Trump confirmó los bombardeos a través de un mensaje en su red Truth Social, donde afirmó que el país está llevando a cabo una respuesta contundente contra los responsables del ataque. Asimismo, señaló que los operativos se concentran en bastiones del EI en Siria con el objetivo de erradicar al grupo.
Las autoridades estadounidenses informaron que el agresor del ataque en Palmira, presuntamente vinculado al Estado Islámico, fue abatido tras el incidente.
