El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, recibió este jueves al secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, en el Palacio de Carondelet, sede presidencial del país, para una reunión centrada en la cooperación bilateral en seguridad.
El gobierno de Noboa, aliado de Washington en la lucha contra grupos criminales transnacionales, espera avanzar en nuevos acuerdos que fortalezcan la seguridad en Ecuador y la región.
Tras el encuentro privado, Rubio se reunirá con miembros del gabinete ecuatoriano y ofrecerá una rueda de prensa junto a la ministra de Relaciones Exteriores, Gabriela Sommerfeld, a las 10:30 a.m., hora local.
Entre los temas tratados, Estados Unidos solicitó un acuerdo para que Ecuador reciba hasta 300 personas deportadas por año.
Sommerfeld aclaró que este programa será limitado, dirigido solo a personas refugiadas de ciertas nacionalidades, sin antecedentes penales y en buen estado de salud, diferenciándose del convenio existente con El Salvador.
Ecuador ha intensificado su lucha contra el crimen organizado y considera que aún enfrenta un “conflicto armado interno”. El país respalda a Washington en la calificación como organizaciones terroristas de grupos como Tren de Aragua (TDA) y el Cártel de los Soles, ambos originarios de Venezuela.
La visita de Rubio coincide con un reciente operativo militar estadounidense en el sur del Caribe contra una lancha venezolana vinculada al TDA, lo que aumentó la tensión con Caracas.
Además de seguridad, el comercio será parte de las conversaciones. Quito busca la reducción del arancel del 15% impuesto por Estados Unidos, mientras que Washington busca disminuir su déficit comercial, estimado en 1.900 millones de dólares en 2024. Funcionarios estadounidenses también han mostrado interés en apoyar que Ecuador reduzca su dependencia de inversiones chinas.