El presidente de Argentina, Javier Milei, fue atacado con piedras y otros objetos mientras participaba en una caravana electoral en Lomas de Zamora, un bastión peronista, en medio de la campaña para los comicios del 7 de septiembre en Buenos Aires y de denuncias de corrupción que involucran a su gobierno y a la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS).
El mandatario, que viajaba en una camioneta descubierta, no resultó herido, pero fue protegido por su equipo de seguridad y trasladado a un vehículo blindado.
Junto a él se encontraban su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el candidato oficialista José Luis Espert, quien debió retirarse en motocicleta sin protección. Todos fueron luego llevados a la residencia presidencial en Olivos, donde se confirmó que Milei estaba ileso.
La protesta reunió a manifestantes de distintos sectores, entre ellos familiares de personas con discapacidad, que reclamaban por la reducción de pensiones estatales tras el veto presidencial a una ley de apoyo a la ANDIS.
Marina Londris, madre de un niño con autismo, denunció el impacto de los recortes y criticó el manejo de los fondos destinados a las personas con discapacidad.
El incidente generó reacciones de miembros del Ejecutivo, quienes responsabilizaron al peronismo por la violencia, mientras que el alcalde de Lomas de Zamora, Federico Otermín, había pedido que la protesta se realizara de manera pacífica.
La tensión se produce en un contexto de denuncias de corrupción vinculadas a la ANDIS, recientemente difundidas a través de audios que describen presuntos sobornos.