Este viernes, las autoridades de la región rusa de Krasnodar informaron sobre una explosión que ocurrió en un depósito de petróleo después de un ataque de dron ucraniano a principios de semana.
Según los informes, el incidente ocurrió durante los esfuerzos de los bomberos por extinguir un incendio provocado por el ataque.
Las autoridades detallaron que, durante las labores de extinción, la despresurización de un tanque en llamas causó una explosión, liberando productos petrolíferos y generando un incendio aún mayor. El fuego se propagó a un depósito cercano, aumentando la superficie afectada a 10.000 metros cuadrados, más del doble del área inicial.
Más de 450 bomberos están trabajando para controlar las llamas, aunque dos de ellos resultaron heridos. Además, se han detectado niveles peligrosos de sustancias químicas como el benceno en el aire de dos áreas cercanas al incendio, según pruebas atmosféricas realizadas por las autoridades.
El depósito afectado está ubicado cerca de la aldea de Kavkázskaya, en una terminal ferroviaria que suministra petróleo a un oleoducto que conecta Rusia con Kazajistán y el mar Negro.
Este ataque subraya el impacto de los frecuentes ataques ucranianos a la infraestructura energética rusa, una parte clave de los ingresos de Rusia para su esfuerzo bélico.
En respuesta, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia acusó a Ucrania de violar una propuesta de alto el fuego al realizar este ataque.
Mientras tanto, Rusia ha intensificado sus propios ataques contra la red energética ucraniana, provocando apagones en diversas zonas del país.