El gobierno de Estados Unidos buscará la pena de muerte para Rafael Caro Quintero, Vicente Carrillo Fuentes, alias “El Viceroy”, Luis Gerardo Méndez Estevane, conocido como “El Tío”, y otros tres narcotraficantes extraditados desde México.
El Departamento de Estado de Estados Unidos informó en un comunicado que entre los acusados que también enfrentarían la pena capital se encuentran Martín Sotelo, alias “Alder Martin-Sotelo” o “Alder Alfonso Marin”, José Rodolfo Villarreal Hernández y Andrés Clark.
Según el comunicado, “muchos de los acusados fueron objeto de solicitudes de extradición de larga data de Estados Unidos que no fueron atendidas durante el gobierno del presidente Joe Biden, pero que el gobierno mexicano decidió transferir al actual gobierno de Estados Unidos en respuesta a los esfuerzos del Departamento de Justicia de conformidad con la directiva del Presidente Trump en la Orden Ejecutiva 14157, titulada Designación de Cárteles y Otras Organizaciones como Organizaciones Terroristas Extranjeras y Terroristas Globales Especialmente Designados, para buscar la eliminación total de estos cárteles”.
Además, se destacó que los fiscales federales evaluarán la posibilidad de presentar cargos adicionales por terrorismo y violencia, de acuerdo con la Orden Ejecutiva 14157, y determinarán si la pena de muerte es aplicable según la Orden Ejecutiva 14164, titulada Restauración de la pena de muerte y protección de la seguridad pública, así como la guía del Fiscal General del 5 de febrero sobre la pena capital.
“Hoy, 29 miembros fugitivos del cártel han llegado a los Estados Unidos desde México, incluido un nombre que está por encima del resto para los hombres y mujeres de la DEA: Rafael Caro Quintero, un capo del cártel que desató la violencia, la destrucción y la muerte en Estados Unidos y México.
“Ha pasado cuatro décadas en la cima de la lista de fugitivos más buscados de la DEA, y hoy podemos decir con orgullo que ha llegado a los Estados Unidos, donde se hará justicia”, expresó el administrador interino de la DEA, Derek S. Maltz.
Por su parte, la fiscal general Pamela Bondi reafirmó el compromiso del Departamento de Justicia contra el crimen organizado: “Como el presidente Trump ha dejado claro, los cárteles son grupos terroristas, y este Departamento de Justicia se dedica a destruir cárteles y pandillas transnacionales”.
“Enjuiciaremos a estos delincuentes en toda la extensión de la ley en honor a los valientes agentes de la ley que han dedicado sus carreras, y en algunos casos, han dado sus vidas, a proteger a personas inocentes del flagelo de los cárteles violentos. No descansaremos hasta que aseguremos la justicia para el pueblo estadounidense”.