En una contienda electoral marcada por el frío extremo, Donald Trump superó a sus rivales para ganar la primera contienda presidencial republicana de 2024 en Iowa, según las proyecciones de Edison Research, afirmando una vez más su dominio sobre el partido mientras busca una tercera nominación presidencial consecutiva.

Mientras el exmandatario celebraba su casi inevitable victoria, la verdadera batalla se libraba por el segundo lugar entre el gobernador de Florida, Ron DeSantis, y la exembajadora ante la ONU, Nikki Haley, según las proyecciones de Edison. Con Iowa como escenario, ambos contendientes buscan posicionarse como la alternativa principal al liderazgo de Trump en el partido.

A pesar de los desafiantes elementos climáticos que desafiaron a los habitantes de Iowa, más de mil 600 escuelas y centros comunitarios se convirtieron en puntos de encuentro para el primer caucus del estado. Este evento marca el inicio oficial de la campaña presidencial de 2024, tras meses de debates, mítines y anuncios.

La victoria dominante de Trump refuerza su argumento de ser el único candidato republicano capaz de enfrentarse al actual presidente demócrata, Joe Biden, a pesar de los desafíos legales que enfrenta. La fidelidad de sus partidarios, evidenciada en la encuesta de entrada de Edison, sugiere que incluso ante posibles condenas, Trump mantiene un sólido respaldo.

DeSantis y Haley, luchando por un sólido segundo lugar, esperaban demostrar que podrían frenar el avance imparable de Trump hacia la nominación. Con el gobernador DeSantis enfocando gran parte de su campaña en Iowa, su desempeño aquí podría determinar el rumbo de su candidatura.

El peculiar sistema de caucus de Iowa, que requiere que los votantes se reúnan en persona en pequeños grupos para emitir su voto secreto, añadió un desafío adicional a la jornada electoral. Las bajas temperaturas, que alcanzaron los -45 grados Fahrenheit en algunas áreas, podrían haber afectado la participación, aunque la lealtad de los seguidores de Trump podría haber inclinado la balanza a su favor.

A pesar de su ausencia en muchos actos de campaña, Trump confió en el respaldo de sus seguidores para movilizar el apoyo necesario. Mientras tanto, tanto el empresario Vivek Ramaswamy como el exgobernador de Arkansas Asa Hutchinson participaron en la contienda, aunque sus expectativas de apoyo eran moderadas.

Con Iowa como el punto de partida, la atención se dirige ahora hacia el estado más moderado del noreste, Nuevo Hampshire, donde se elegirá al candidato republicano en ocho días. Aunque Trump lidera las encuestas, DeSantis y Haley buscarán capitalizar cualquier oportunidad para cambiar el rumbo de la contienda en su favor.