Ayala.- La negativa de las autoridades estatales y federales para atender la preocupación de ejidatarios de la región oriente de Morelos, que temen quedarse sin agua para sus cultivos con la operación de la termoeléctrica, estuvo a punto de ocasionar un enfrentamiento, luego de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) reanudara la construcción del acueducto en la comunidad de San Pedro Apatlaco.

Desde el pasado sábado, la tensión se incrementó en el plantón que los campesinos mantienen desde hace un mes para evitar la conexión del acueducto a la planta tratadora de aguas residuales de Cuautla, cuando llegaron máquinas y pasaron los límites que se habían fijado para no continuar con el acueducto hasta llegar a un acuerdo.

Un grupo de policías antimotines del Mando Único llegaron al lugar para amedrentar a los campesinos y reforzar el cerco de seguridad que resguarda los trabajos del acueducto.

Este lunes, la CFE volvió a violar los acuerdos y reanudó la introducción de la tubería, lo que hizo que los inconformes tocaran las campanas de la capilla cercada para reagruparse y acudir a parar las máquinas. Esto provocó un segundo conato de enfrentamiento que no pasó a mayores, pero tensó más el ambiente, sin que las autoridades de los tres niveles de gobierno acudieran a atender el conflicto.

Un funcionario de la CFE había prometido dialogar con los comisariados y ayudantes que se encuentran en el plantón pero a la hora de la reunión se retractó y no se presentó. Alrededor de las 14:45 horas, cansados de ser ignorados y al ver que la maquinaria seguía trabajando, los agricultores acudieron hasta donde se encontraba el cerco de seguridad implementado por la Policía del Mando Único, y al no ser escuchados, lo traspasaron para parar de nueva cuenta la maquinaría.

Lo anterior, estuvo a punto de ocasionar un enfrentamiento, pues entre los campesinos ignorados se encuentran numerosos hombres de avanzada edad, los cuales fueron empujados y jaloneados para impedirles el paso.

Después de este conato de enfrentamiento, los comisariados ejidales recibieron una llamada para invitarlos a un diálogo por la tarde con el presidente municipal de Cuautla, Raúl Tadeo Nava, sin que al cierre de esta edición se informara del resultado.

Los campesinos manifestaron su temor de que en cualquier momento la Policía del Mando Único acuda a reprimirlos, para romper el plantón en el puente de San Pedro Apatlaco. Durante todo el día, hubo la presencia de una visitadora de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CDHEM) atestiguando los acontecimientos.