Cada 12 de mayo se conmemora el Día Internacional de la Enfermería, una fecha dedicada a valorar el esfuerzo y la entrega del personal de enfermería en todo el mundo. Esta celebración también recuerda a Florence Nightingale, pionera de la enfermería contemporánea, quien nació un día como este y sentó las bases del modelo moderno de atención sanitaria.
Lema 2025: "Nuestras enfermeras, nuestro futuro"
La edición 2025 de esta conmemoración gira en torno al lema: “Nuestras enfermeras. Nuestro futuro. Cuidar a las enfermeras fortalece las economías”. Este mensaje resalta la importancia de garantizar condiciones adecuadas para quienes ejercen esta profesión, ya que una plantilla de enfermería saludable es esencial para el bienestar comunitario, la eficiencia en los sistemas de salud y el crecimiento económico global.
¿Qué hace relevante esta profesión?
La enfermería es un campo esencial en la atención médica. Las personas que ejercen esta disciplina brindan cuidados a pacientes con distintas afecciones y necesidades clínicas. Esta labor exige entrega, vocación y un fuerte compromiso ético, ya que implica acompañar al paciente en su proceso de recuperación de forma empática y profesional.
El papel del Consejo Internacional de Enfermería
Desde 1974, esta fecha es promovida por el Consejo Internacional de Enfermeras, entidad fundada en 1899 que agrupa actualmente a 130 asociaciones nacionales. Esta organización fue la primera en representar a nivel mundial a las y los enfermeros, con el objetivo de impulsar prácticas sanitarias eficaces, políticas públicas eficientes, desarrollo académico del área y presencia profesional sólida y respetada.
La huella de Florence Nightingale
Florence Nightingale, originaria de Florencia, Italia, es recordada como la impulsora de la enfermería moderna. Su enfoque revolucionario integró métodos estadísticos y principios de salud pública, transformando la forma en que se ofrecía atención médica. Durante la guerra de Crimea en 1854, lideró a un grupo de enfermeras voluntarias que marcaron un cambio histórico en la atención a soldados heridos, logrando disminuir drásticamente la mortalidad por falta de higiene y cuidados adecuados.
Por su destacada trayectoria, fue la primera mujer reconocida por la American Statistical Association y miembro de la Royal Statistical Society. Conocida como la “Dama de la Lámpara”, su legado perdura como símbolo de entrega y humanismo en el campo de la salud.