Cuando el calor aprieta, buscar refugio es clave para evitar la fatiga. Y si hay algo que puede revivir el espíritu en días calurosos, es un buen postre. ¿Y qué mejor que una deliciosa gelatina de mosaico para refrescar el paladar y alegrar el día?

La gelatina de mosaico, también conocida como gelatina de vitral o tricolor, se distingue por su apariencia colorida, con capas de diferentes sabores de gelatina sobre una base blanca que resalta sus colores. Este postre es especialmente popular en países como México y Brasil, y se prepara utilizando distintos sabores de gelatina, los cuales se preparan y cuajan por separado.

Gelatina de mosaico

Ingredientes

80 gr ó 8 cucharadas ó 9 sobres de grenetina
1 taza de agua
2 latas de leche condensada
1 litro de leche
1 taza de crema
2 limones, sólo el jugo
2 naranjas, sólo el jugo
1 toronja, sólo el jugo
1/2 taza de jugo de mandarina
Colorante vegetal verde, amarillo, naranja y rosa
1 molde de 22 cm de diámetro previamente engrasado
 

Preparación

Hidrata la grenetina en el agua.
Calienta las leches hasta que suelten el hervor, agrega la grenetina hidratada, integra y retira.
Añade la crema y mezcla; deja tibiar.
Vierte la preparación al molde y refrigera hasta que cuaje.
Mete un cuchillo liso dentro de un tazón con agua muy caliente.
Corta dos rebanadas de la gelatina dentro del molde y retíralas con cuidado.
Fúndelas en un tazón y agrega el jugo de limón colado y un poco de colorante verde, deja tibiar y vuelve a rellenar los huecos con esta gelatina.
Refrigera hasta que se congele.
Repite el procedimiento con los siguientes jugos y colorantes hasta que termines.
Alterna los colores e incluso deja algunas partes en blanco.
Refrigera hasta que cuajen totalmente.
Desmolda con cuidado y sirve de inmediato.
Ojo: también puedes dejar la base blanca, cuajar las gelatinas de colores, cortarlas en cuadritos regulares y cubrir con otra parte de gelatina de leche para que queden cuadritos en lugar de líneas.

Tip para desmoldar: Una vez que la gelatina esté completamente cuajada, sumerge el molde en agua caliente durante unos segundos para aflojarla. Luego, coloca un plato sobre la parte superior del molde y dale la vuelta para desmoldar la gelatina de mosaico con cuidado.