Apple suma un nuevo revés legal tras perder una demanda antimonopolio en Reino Unido, donde autoridades determinaron que la compañía abusó de su posición en el mercado para imponer “precios excesivos e injustos” en la App Store.
La resolución podría costarle a la firma de Cupertino una multa de hasta £1,500 millones de libras, a menos que prospere la apelación que presentará en los próximos días.
El Tribunal de Apelación de Competencia (CAT) concluyó que Apple obtuvo ganancias desproporcionadas mediante la comisión del 30% aplicada a desarrolladores, socios y consumidores por compras y servicios dentro de las aplicaciones.
Esta tarifa, eje central del conflicto entre Apple y Epic Games, ha generado controversia en toda la industria del entretenimiento digital, especialmente en el sector de los videojuegos y servicios móviles.
La decisión ha sido celebrada por representantes de la industria, como Chris Hewish, presidente de Xsolla, quien señaló que el fallo podría transformar el mercado de los videojuegos móviles al fomentar tarifas más justas, mayor competencia y mejores precios para los usuarios.
Añadió que una reducción de la comisión permitiría a los desarrolladores reinvertir en innovación, contenido y crecimiento, en lugar de destinar altos porcentajes a comisiones de plataforma.
“Si bien Apple planea apelar, el fallo refuerza la presión regulatoria global y podría acelerar un reparto de ingresos más justo, permitiendo a los desarrolladores de juegos móviles reinvertir en contenido, marketing e innovación en lugar de en las comisiones de la plataforma”.
Apple, por su parte, rechazó el veredicto y asegura que la resolución pasa por alto el aporte que la App Store ha hecho al ecosistema digital.
La compañía sostiene que su plataforma ha permitido el éxito de miles de desarrolladores y garantiza a los usuarios un entorno seguro, con estrictas medidas de privacidad y protección.
Argumenta también que compite con otros sistemas con estándares de seguridad más bajos, por lo que considera injustas las acusaciones.
“Este fallo pasa por alto cómo la App Store ayuda a los desarrolladores a tener éxito y ofrece a los consumidores un lugar seguro y confiable para descubrir aplicaciones y realizar pagos de forma segura. La App Store se enfrenta a una fuerte competencia de muchas otras plataformas, a menudo con muchas menos protecciones de privacidad y seguridad”.
La sentencia final se conocerá la próxima semana, cuando se revise la apelación. De mantenerse el fallo, podría marcar un precedente histórico para el control regulatorio global sobre plataformas tecnológicas y abrir la puerta a nuevos ajustes en las políticas de monetización de App Store.
