Conectarse a una red Wi-Fi suele implicar teclear contraseñas largas y complicadas, una tarea repetitiva cada vez que agregamos un nuevo dispositivo en casa, la oficina o en lugares públicos.
Sin embargo, existen métodos legales y sencillos que permiten conectarse sin introducir la clave manualmente, aprovechando funciones disponibles en la mayoría de routers y sistemas operativos modernos.
1. Escanear el código QR del router
Muchos routers incluyen un código QR en la base o parte trasera que contiene los datos de acceso a la red. Escanearlo con la cámara del móvil permite conectarse automáticamente si la contraseña no ha sido modificada.
Este método es práctico en entornos domésticos, oficinas o establecimientos donde el router es accesible, aunque si la clave ha cambiado, el QR queda inválido.
2. Usar el botón WPS del router
La función WPS (Wi-Fi Protected Setup) permite conectar dispositivos sin escribir la contraseña. Solo hay que presionar el botón físico WPS del router y activar la opción en el móvil.
No todos los routers incluyen esta función por motivos de seguridad, y en algunos casos se requiere introducir un PIN impreso en el dispositivo.
3. Compartir la red desde otro dispositivo
Otra alternativa consiste en usar un móvil que ya esté conectado para compartir la red. Android permite generar un código QR desde los ajustes de Wi-Fi, mientras que los iPhone ofrecen intercambio de contraseñas entre equipos Apple cercanos.
Algunos fabricantes incluyen herramientas adicionales, como Quick Share, para agilizar este proceso. Este método resulta especialmente útil cuando varios usuarios necesitan conectarse rápidamente a la misma red.
Todos estos métodos requieren acceso físico al router o la colaboración de un usuario autorizado. Son soluciones seguras y rápidas diseñadas para simplificar la conexión a Wi-Fi sin tener que teclear manualmente largas contraseñas.