El Gobierno de México anunció el desarrollo de un modelo de lenguaje propio basado en inteligencia artificial (IA), que buscará posicionar al país como un referente tecnológico en América Latina y alinearlo con el nuevo orden económico global centrado en datos y talento.
El proyecto, que cuenta con el respaldo de la empresa Nvidia, será presentado oficialmente durante el evento “México IA + Inversión Acelerada”, a celebrarse el 12 y 13 de noviembre en Expo Santa Fe, Ciudad de México, y reunirá a más de 100 expertos internacionales.
Durante la presentación, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, destacó que contar con un modelo lingüístico nacional es clave para competir en la nueva economía digital, al considerar a la inteligencia artificial como el “alfabeto moderno”.
“O nos apuramos para manejar ese alfabeto o va a ser una desventaja muy grande en el nuevo acomodo que está surgiendo hoy”, advirtió.
Incorporación de cultura y lenguas indígenas
El modelo de IA mexicano integrará elementos culturales propios y lenguas indígenas, con el objetivo de desarrollar una tecnología más cercana a la identidad nacional.
En el país existen actualmente 68 lenguas indígenas activas, como el náhuatl, zapoteco o mixteco, que podrían formar parte de esta innovación.
Este enfoque también se vincula con Latam-GPT, una iniciativa conjunta entre Nvidia, el Gobierno de Chile y otros países hispanohablantes, que busca crear modelos lingüísticos adaptados a las culturas de América Latina.
Según Marcio Aguiar, director de Nvidia para América Latina, la colaboración científica entre países como México y Chile ya está rindiendo frutos, y se espera que la IA pueda ser una herramienta para preservar y difundir lenguas originarias.
“Un modelo como el paraguayo, que enseña guaraní, ya es referencia. Podríamos ver lo mismo con el mixteco, el zapoteco o el náhuatl”, afirmó Aguiar.
Ecosistema e infraestructura para el desarrollo de IA
Marcelo Ebrard aseguró que México ya cuenta con una base sólida para desarrollar su propio ecosistema de inteligencia artificial, y que el objetivo es que sus beneficios lleguen a más de 5 millones de estudiantes universitarios y 5 millones de empresas.
Para lograrlo, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) estima que la inversión en centros de datos podría alcanzar los 9,200 millones de dólares, generando un impacto económico indirecto de hasta 27,000 millones de dólares, con más de 70 nuevos centros de datos especializados en servicios en la nube y procesamiento de datos.
Ebrard subrayó que este avance debe verse como un esfuerzo coordinado entre gobierno, iniciativa privada e instituciones académicas, con resultados visibles en un plazo de dos años.
Con este proyecto, México no solo busca modernizar su infraestructura tecnológica, sino también asegurar que el desarrollo de la inteligencia artificial refleje y preserve su diversidad cultural y lingüística, convirtiéndose en un actor clave dentro de la transformación digital de América Latina.