Durante la Conferencia Mundial de Desarrolladores (WWDC) 2025, Apple presentó oficialmente Apple Intelligence, su propuesta de inteligencia artificial que, aunque discreta frente a sus competidores, pone la privacidad del usuario en el centro de su estrategia.
A diferencia de otras grandes tecnológicas, Apple ha diseñado muchas de sus nuevas funciones para que se ejecuten directamente en los dispositivos y no en la nube, lo que reduce el riesgo de filtraciones de datos y mejora la velocidad de procesamiento. Este enfoque busca diferenciar a la compañía en un mercado saturado de soluciones de IA que, en muchos casos, dependen de servidores externos para funcionar.
Funciones con procesamiento local
Entre las novedades destacan:
Clasificación inteligente de mensajes, que detecta y filtra mensajes sospechosos, spam o de remitentes desconocidos sin conexión a internet.
Filtrado automático de llamadas no confiables, que transcribe y resume el motivo de la llamada antes de que el usuario decida contestar.
Traducción en tiempo real en llamadas y mensajes, también con procesamiento en el dispositivo.
Todas estas funciones están disponibles únicamente en los dispositivos más recientes, dado que requieren capacidad avanzada de procesamiento local.
Private Cloud Compute y ChatGPT opcional
Cuando se requiere apoyo en la nube, Apple utiliza su nueva infraestructura llamada Private Cloud Compute, diseñada con altos estándares de seguridad. Además, ofrece integraciones con IA de terceros como ChatGPT, pero solo si el usuario lo activa manualmente. Apple garantiza que las consultas no están vinculadas al Apple ID y que oculta la dirección IP del usuario.
Privacidad como diferenciador
Con esta estrategia, Apple refuerza su mensaje: la privacidad no es un complemento, es una característica principal. Si bien sus decisiones pueden limitar la disponibilidad en dispositivos más antiguos, el control sobre hardware y software le permite enfocarse en ofrecer funciones avanzadas sin comprometer la seguridad de sus usuarios.
En un entorno donde los datos personales se han convertido en moneda de cambio, Apple parece decidida a posicionarse como la opción más segura dentro del ecosistema de la inteligencia artificial.