Un equipo de investigadores en Corea del Sur ha desarrollado los primeros paneles solares completamente transparentes, capaces de generar electricidad sin afectar la visibilidad. Esta innovación representa un avance clave en energía renovable al permitir que ventanas y pantallas se conviertan en generadores eléctricos invisibles.
Tecnología revolucionaria que no compromete la estética
La clave está en el uso de materiales ultrafinos: dióxido de titanio (TiO₂), que absorbe luz ultravioleta, y óxido de níquel (NiO), que permite el paso de la luz visible. Estas capas, de menos de 100 nanómetros de grosor, capturan luz UV e infrarroja, invisibles al ojo humano, dejando pasar hasta el 85% de la luz visible. Actualmente, la eficiencia de conversión energética es del 2%, con mejoras en desarrollo.
“Es la primera tecnología solar que puede integrarse en superficies transparentes sin afectar el diseño”, afirmó el Dr. Lee Kwang-hee, líder del proyecto.
Aplicaciones con gran impacto
La tecnología podría revolucionar la arquitectura sostenible, permitiendo que fachadas de edificios, invernaderos y techos de estadios generen su propia energía. También se vislumbran usos cotidianos: ventanas de autos eléctricos, pantallas de smartphones auto-recargables y paradas de autobús con iluminación propia.
Desafíos y proyección comercial
Antes de su adopción masiva, el equipo busca aumentar la eficiencia al 5%, extender la vida útil actual de 5 años y reducir los costos de producción. En 2025 se realizarán pruebas en edificios gubernamentales en Seúl, y ya se está trabajando con Samsung para su aplicación en dispositivos móviles. Se espera que la tecnología esté disponible comercialmente en 2026.
Este avance promete una integración real de la energía solar en la vida cotidiana, sin sacrificar diseño ni funcionalidad.