La cantante mexicana Paulina Rubio enfrenta un nuevo conflicto legal en Estados Unidos tras ser desalojada de una lujosa residencia en Miami, Florida.
De acuerdo con documentos judiciales y reportes de medios internacionales, la artista habría acumulado una deuda superior a los 110 mil dólares por impago de renta y daños al inmueble.
El propietario de la mansión, valuada en 17 millones de dólares, presentó una demanda por incumplimiento de contrato y daños estructurales.
Rubio —de 54 años— dejó de pagar dos meses de renta, equivalentes a 70 mil dólares, además de permanecer 15 días adicionales en la vivienda tras vencer el contrato, lo que incrementó la deuda.
"Paulina no pagó al propietario dos meses de alquiler adecuado, según los términos del arrendamiento", se informó en el programa vespertino de Telecinco.
La demanda también incluye 5,259 dólares por reparaciones y mantenimiento del inmueble. En total, el monto reclamado supera los 110 mil dólares, y podría aumentar debido a sanciones por “ocupación ilegal”, contempladas en la legislación del estado de Florida.
Rubio habitó la propiedad entre marzo de 2024 y abril de 2025, y de acuerdo con el periodista Javier Ceriani, el desalojo se llevó a cabo tras la orden judicial emitida a favor del propietario.
El caso ha causado gran revuelo mediático, pues se suma a una serie de controversias legales que la cantante ha enfrentado en los últimos años.
Entre sus antecedentes figuran disputas judiciales con su expareja Nicolás Vallejo-Nágera (Colate) por la custodia de su hijo, así como demandas por incumplimiento de contratos y reclamos financieros en el ámbito profesional.
Fuentes cercanas a la defensa de la artista indicaron que Paulina Rubio analiza posibles acciones legales, entre ellas impugnar los montos exigidos o buscar un acuerdo extrajudicial que le permita resolver el conflicto sin un proceso prolongado en tribunales.
Mientras tanto, la intérprete de Ni una sola palabra y Yo no soy esa mujer vuelve a estar en el centro de la polémica, esta vez no por su carrera musical, sino por un proceso legal que podría afectar su imagen pública y su situación financiera en Estados Unidos.