Johnny Depp ha vuelto a hablar sin filtros sobre uno de los episodios más polémicos de su carrera: su abrupta salida de la saga Animales fantásticos, precuelas del universo Harry Potter.
En una reciente entrevista para The Telegraph, el actor, de 61 años, se sinceró sobre cómo vivió aquel momento y dejó claro que no guarda silencio ante quienes intentaron “acabar” con su carrera.
Depp interpretó al oscuro mago Gellert Grindelwald en Los crímenes de Grindelwald, segunda entrega de la saga. Sin embargo, en pleno rodaje de la tercera película, Warner Bros. le pidió renunciar debido a la batalla legal y mediática con su exesposa Amber Heard.
“Me dijeron: ‘Nos gustaría que renuncies’. Pero lo que realmente querían era que me retirara”, relató Depp. Su respuesta fue directa: “Que os den. Soy demasiado importante como para que acabéis conmigo. Si creéis que podéis dañarme más de lo que ya me han herido, estáis muy equivocados.”
Tras su salida, Warner Bros. reemplazó a Depp por el actor danés Mads Mikkelsen en Los secretos de Dumbledore, tercera y última entrega de la franquicia, que no logró convencer en taquilla ni entre la crítica.
El propio Mikkelsen, que heredó el papel, reconoció la dificultad de sustituirlo y le mostró respeto: “Fue muy intimidante. Soy muy fan de Johnny y creo que hizo un trabajo fantástico.”
El pobre desempeño de Los secretos de Dumbledore llevó a Warner Bros. a poner en pausa indefinida la saga, originalmente planeada para cinco películas. Hoy, el futuro del Mundo Mágico apunta a la nueva serie de Harry Potter que prepara HBO Max, con un reparto totalmente renovado.
Mientras tanto, Johnny Depp retoma poco a poco su carrera en Hollywood. Tras protagonizar Jeanne du Barry, volverá a la gran pantalla con Day Drinker, un thriller dirigido por Marc Webb (The Amazing Spider-Man), junto a Penélope Cruz y Manu Ríos.
Y aunque los rumores sobre su regreso como Jack Sparrow en Piratas del Caribe siguen vivos entre fans, el actor ha reiterado públicamente que no planea volver a la saga, ni siquiera “por 300 millones de dólares y un millón de alpacas”, como declaró durante su juicio contra Heard.