El caso por la muerte del actor Matthew Perry, ícono de la serie Friends, dio un giro importante luego de que el médico Salvador Plasencia, acusado de suministrar ilegalmente ketamina al actor, aceptara un acuerdo para declararse culpable, según informó el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Plasencia, señalado como el principal responsable de haber aprovechado la adicción del actor al potente anestésico, planea declararse culpable de distribución de ketamina en las próximas semanas. De ser condenado, podría enfrentar hasta 40 años de prisión en una cárcel federal.
Aunque no fue quien suministró directamente la dosis que causó la muerte de Perry, la fiscalía sostiene que Plasencia desempeñó un papel central al aprovecharse del estado de salud mental del actor y participar activamente en la distribución de la sustancia.
En mensajes recuperados por las autoridades, el médico llegó a referirse despectivamente a Perry mientras negociaba los precios de la droga. Se estima que vendía cada frasco —adquirido por 12 dólares— en hasta 2,000 dólares.
Según el acuerdo de culpabilidad, Plasencia entregó al menos 20 frascos de ketamina en un lapso de dos semanas, ya sea personalmente o a través del asistente de Perry, quien también está involucrado en el caso.
Perry, de 54 años, fue hallado sin vida el 28 de octubre de 2023 en su residencia de Los Ángeles, dentro de un jacuzzi.
El informe forense confirmó que la causa fue una sobredosis accidental de ketamina, sustancia que el actor utilizaba bajo prescripción como parte de un tratamiento para la depresión, pero cuyo consumo se volvió descontrolado en los últimos meses de su vida.
El caso ha sacado a la luz una red de tráfico médico y abuso de fármacos en Hollywood.
Además de Plasencia, ya se declaró culpable el doctor Mark Chavez, quien podría recibir hasta 10 años de prisión. También está imputada Jasveen Sangha, apodada la "reina de la ketamina", acusada de haber vendido el frasco que terminó con la vida del actor.
Enfrenta cadena perpetua, aunque se ha declarado no culpable.
Otros implicados que aceptaron su culpabilidad son el asistente personal de Perry, Kenneth Iwamasa, y un intermediario, Eric Fleming.