El conflicto legal entre los actores Blake Lively y Justin Baldoni, relacionado con la película It Ends With Us, ha dado un giro inesperado, luego de que los abogados de Baldoni presentaran nuevas acusaciones que involucran a la cantante Taylor Swift.
Según documentos legales revelados este 14 de mayo, Lively habría intentado presionar a su amiga Swift para que la defendiera públicamente en medio del caso.
De acuerdo con la carta presentada por el abogado Bryan Freedman ante el juez, una fuente anónima aseguró que Blake Lively habría pedido a Swift borrar mensajes de texto personales y publicar una declaración en su apoyo. La misma fuente indicó que se insinuó que, si Swift se negaba, se filtrarían mensajes privados comprometedores. Estas acusaciones buscan respaldar la citación enviada previamente al equipo legal de Swift, que fue rechazada por los representantes de Lively y su esposo Ryan Reynolds.
En respuesta, los abogados de Blake Lively ofrecieron una entrevista a la revista People, donde negaron rotundamente las acusaciones y aseguraron que se trata de una estrategia sin fundamentos:
"Esto es categóricamente falso. Negamos rotundamente todas estas supuestas acusaciones, que se basan cobardemente en fuentes anónimas y están completamente desconectadas de la realidad", declararon.
También señalaron que los representantes legales de Baldoni están actuando irresponsablemente al presentar afirmaciones sin pruebas, y anunciaron que tomarán acciones legales en su contra por mala conducta profesional.
Por su parte, Taylor Swift, a través de su portavoz, se deslindó por completo del conflicto y exigió no ser involucrada. La cantante aclaró que no participó en el desarrollo de It Ends With Us, ni en decisiones creativas, de producción o casting.
"Taylor Swift nunca estuvo en el set, no compuso música para la película, ni siquiera la vio hasta semanas después de su estreno", explicó su representante, quien subrayó que durante todo el proceso la artista estuvo concentrada en su gira internacional The Eras Tour.
La única conexión entre Swift y la película fue el permiso para usar su canción My Tears Ricochet en la banda sonora.
Este nuevo episodio añade tensión a un caso ya polémico en torno a la adaptación cinematográfica del libro de Colleen Hoover. Mientras continúa la disputa legal entre Lively y Baldoni, la controversia amenaza con salpicar a otras figuras del espectáculo, aunque algunas, como Swift, ya han dejado claro que no tienen intención de participar en el drama.