Una investigación de la Agencia Espacial Europea (ESA) muestra que los vientos en Marte soplan mucho más rápido de lo estimado.
El estudio analizó 1.039 remolinos de polvo, similares a pequeños tornados, usando 20 años de imágenes de las naves Mars Express y ExoMars Trace Gas Orbiter.
El trabajo, publicado en Science Advances y dirigido por Valentin Bickel de la Universidad de Berna, Suiza, es el primero en medir la velocidad y dirección de los remolinos de polvo en todo Marte.
Estas partículas permiten visualizar el viento, que normalmente es invisible, y ayudan a comprender cómo se mueve el polvo por la superficie y la atmósfera del planeta.
El análisis revela que los remolinos pueden alcanzar velocidades de hasta 44 m/s (158 km/h), más altas que las registradas por los róveres en la superficie.
La mayoría de ellos se concentran en zonas específicas, como Amazonis Planitia, aunque se observan en todo el planeta, incluidos los volcanes.
Los remolinos son más frecuentes durante la primavera y el verano de cada hemisferio y suelen formarse entre las 11:00 y las 14:00 horas locales.
Mapa que muestra los remolinos de polvo activos durante la primavera y el verano locales en los hemisferios norte y sur de Marte. / ExoMars TGO
Estudiar el polvo es clave para entender el clima marciano, ya que influye en la temperatura, la formación de nubes y la pérdida de agua al espacio.
Además, conocer la dirección y velocidad del viento es útil para planificar futuras misiones y proteger los paneles solares de los róveres del polvo acumulado.
El catálogo de remolinos creado en este estudio es público y ya se utiliza para planificar misiones, como el róver ExoMars Rosalind Franklin, que llegará a Marte en 2030, evitando la temporada de tormentas de polvo globales.