A pesar que el Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD) ha dado todo su respaldo ante los cambios que se han realizado en el gabinete del gobierno de Graco Ramírez Garrido Abreu, la oposición ha manifestado su descontento, ya que se busca "imponer" a un secretario de Seguridad recién llegado de Baja California, mediante una reforma constitucional aún no acordada.
Tanto diputados del Partido Acción Nacional (PAN) como del Partido Revolucionario Institucional (PRI), manifestaron su inconformidad al dar por hecho una reforma sin que se haya presentado hasta el momento una iniciativa.
Por lo anterior, legisladores de oposición a la izquierda han adelantado que, primero, deberán conocer la propuesta del Poder Ejecutivo antes de opinar si el actual encargado de la Secretaría de Seguridad Pública, Alberto Capella Ibarra, podría cumplir con las necesidades del estado. "No existe (la reforma), no podría yo fijar una postura sobre algo que no existe (...), se toman decisiones al margen de la ley, se busca dar la vuelta a la ley, intentaron salvarla con encargado de despacho cuando lo que se requiere en este lugar y en esas circunstancias es a un secretario con todo el respaldo legal y social que se requiere", aseveró el diputado panista, Javier Bolaños Aguilar.